El bitcoin ha dejado de ser una curiosidad informática o una novedad tecnológica lejana que solo manejan unos pocos iniciados, y cada vez más personas usan a diario esta criptomoneda.
Se trata de un medio digital de intercambio de valor que empezó a funcionar allá por el año 2009 y consiste, esencialmente, en un apunte contable en una gran base de datos distribuida denominada cadena de bloques (blockchain).
Nació como un proyecto comunitario y de software libre, al igual que el sistema operativo linux. Está basado en la criptografía y no depende del gobierno de ningún estado ni de ningún organismo centralizado. Una de sus grandes ventajas es que se puede intercambiar de forma casi instantánea por dinero tradicional, pero además, su diseño tecnológico le otorga otras características muy interesantes.
Esta moneda alternativa es anónima, no se puede embargar, se trasmite con la misma facilidad y velocidad que un correo electrónico, no necesita la intervención de terceros para realizar un cobro o pago tanto nacional como internacional y es matemáticamente imposible de falsificar debido a su complejidad criptográfica y deslocalización.
Aunque todavía no se use masivamente el bitcoin está sufriendo una evolución comparable a la que vivió internet en los años 90, una tecnología que al principio era usada por una minoría, hoy en día se nos hace inimaginable la vida sin ella. Por su naturaleza descentralizada no es fácil saber exactamente el volumen de dinero que mueve.
Según la página web blockchain.info, a principios de 2016 se realizaban 200.000 transacciones diarias, por un importe de 120 millones de dólares. Estas cifras no están muy alejadas de las de Western Union (algo más de 200 millones de dólares diarios) o PayPal (400 millones de dólares diarios).
El boom de cajeros de bitcoins en España
En España el sector del bitcoin ha crecido a gran velocidad en los últimos dos años. La empresa ATMs Bitcoin Exchange se fundó en 2015 en Gerona con el objetivo de instalar y gestionar cajeros automáticos de bitcoins y ya tiene 20 dispositivos repartidos a lo largo y ancho del país en diferentes comunidades autónomas: Cataluña, Madrid, Galicia, País Vasco, Asturias, Comunidad Valenciana, Murcia, las Islas Baleares y Andalucía. Además, la empresa ha comenzado su expansión internacional con la colocación de un cajero en la localidad francesa de Montpellier, a la que seguirán nuevas instalaciones en Grecia, Francia, Portugal, Dubai, México y Argentina.
El fundador de la empresa Miquel J. Pavón lo tiene muy claro, piensa que "en el futuro todas las transacciones se realizarán con bitcoins usando el móvil, la moneda física tiene los días contados". Para lograr esta implantación tan importante considera que "el cajero bitcoin es una pieza clave en toda la transformación que se avecina porque es lo que permite cambiar la moneda física actual por la virtual". La rápida expansión de la empresa se debe al aumento de la demanda en el país, Pavón apunta que "el crecimiento del uso de los cajeros es muy grande".
ATMs Bitcoin Exchange ha confiado la tarea de crear los cajeros a una empresa de ingeniería de su misma matriz, BTC fácil, formada por técnicos muy jóvenes seleccionados con criterios muy estrictos entre los mejores de cada promoción de diversas universidades españolas. Ellos han diseñado y producido tanto el hardware como el software de un dispositivo de vanguardia dotado de las más altas medidas de seguridad, pero a la vez muy fácil de usar para el cliente.
Miguel Ortuño, Director de Tecnología de BTC fácil, centra todos los esfuerzos del equipo en el objetivo de "hacer los mejores cajeros del mercado, los más fiables y sencillos de manejar". La compañía realiza un trabajo continuo para que los dispositivos "se adapten continuamente a las necesidades del cliente final y también del operador". Por otra parte considera que los terminales son una herramienta importante para informar a los clientes sobre la criptomoneda y deben ser "un punto de divulgación sobre el bitcoin, su uso y todas sus ventajas".
El cajero de bitcoins, dotado de una pantalla táctil, es tan fácil de usar como un cajero tradicional, con la ventaja de que dispone de vídeos explicativos sobre los aspectos básicos del bitcoin y del uso del propio cajero. En el interior de su armazón sus componentes principales son un ordenador con un sistema operativo linux, un reciclador de billetes, una impresora, un sistema de alimentación ininterrumpida, un dongle de seguridad y un generador de hardware de números aleatorios.
BTC fácil quiere ayudar a acercar más el bitcoin al comercio, por ello la empresa ha desarrollado un procesador de pagos que permite integrar el bitcoin en cualquier negocio, tanto online como tradicional. La plataforma hace posible que el consumidor pague usando la criptomoneda y el negocio reciba el importe en euros o en bitcoin, en la proporción que prefiera.
La ventaja del teléfono móvil
Otra forma en la que el bitcoin está llegando a los usuarios españoles es a través de los teléfonos móviles. Bitphone, también es una las apuestas empresariales de Miquel J. Pavón, permite recargar el teléfono móvil usando bitcoins, algo que se puede hacer por internet o en sus tiendas físicas, cuatro de ellas ya están abiertas al público en Madrid, Barcelona y Girona, pero pronto se sumarán otras dos en Canarias y Alicante. Los establecimientos permiten acceder a una amplia gama de teléfonos móviles, recargar el teléfono usando la criptomoneda y además cuentan con un cajero automático de bitcoins. Próximamente la red de Biphone se extenderá por todo el país ya que el negocio abre la posibilidad a los pequeños inversores de abrir su propia establecimiento como franquicia de la cadena.
La fuerza del bitcoin parece imparable, los bancos no se quieren quedarse fuera y están apostando por usar su tecnología, la cadena de bloque o blockchain para hacer sus transacciones. Cada vez son más las posibilidades de esta criptomoneda y no parece muy lejano el momento en el que surja una killer app, una aplicación que provoque que el bitcoin pase a ser usado masivamente. De hecho el Parlamento Europeo también es consciente de sus múltiples ventajas y en su resolución de mayo de 2016 destaca el potencial de las monedas virtuales para mejorar y abaratar transacciones financieras y mecanismos de pago.