Banco Popular ha nombrado a Pedro Larena Landeta nuevo consejero delegado de la entidad en sustitución de Francisco Gómez, que cesa en su cargo y como miembro del consejo, según ha comunicado el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Esta decisión fue tomada por el consejo de administración de Popular en su reunión del pasado miércoles, 27 de julio. Larena también ha sido nombrado vocal del consejo. Estos nombramientos surtirán efecto a 1 de septiembre de 2016. El banco señala que están sujetos a las autorizaciones regulatorias correspondientes.
Popular ha agradecido a Gómez su dedicación durante los 30 años que ha permanecido en el grupo y ha reconocido su capacidad de gestión. "Durante su periodo como consejero delegado ha impulsado de manera notable la actividad comercial", señala la entidad en un comunicado.
Larena, por su parte, tendrá la misión de llevar a cabo la gestión ordinaria del negocio, así como la responsabilidad de ejecutar el plan estratégico presentado por el banco en la ampliación de capital.
Popular señala que Larena acumula "una amplia experiencia" en banca minorista, tanto en entidades financieras nacionales como internacionales.
Reduce las ganancias
Por otro lado, Banco Popular registró un beneficio neto atribuido de 94 millones de euros en el primer semestre del año, un 50% menos que el mismo periodo del año anterior, según ha comunicado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El beneficio neto ordinario de la entidad, exprovisiones extraordinarias, alcanzó los 168 millones de euros hasta junio, un 10,6% menos que en el mismo periodo del año anterior.
El banco explica que esta variación se debe a la"intensa reducción de los márgenes" por los bajos tipos de interés, la supresión de las cláusulas suelo y la dotación de 52 millones de euros al Fondo Único de Resolución del Banco Central Europeo (BCE).
Con el fin de acelerar el ritmo de desinversiones de activos no productivos y potenciar las fortalezas del negocio principal, la entidad ha destinado 106 millones de euros a provisiones extraordinarias.
Al anticipar dichas provisiones, el beneficio reportado en el segundo trimestre ha sido cero, por lo que el beneficio neto acumulado en el primer semestre de 2016 es de 94 millones de euros.
Plan de reestructuración
Por otra parte, el banco ha anunciado la reestructuración de su negocio, para lo que ha separado la gestión de la actividad principal de la gestión del negocio inmobiliario y asociado.
El objetivo de esta división es que una parte de la organización esté centrada en la generación del negocio rentable y recurrente, y la otra en la reducción de activos no productivos y en la rentabilización del negocio inmobiliario corriente.
En este sentido, la actividad principal registró un beneficio de 577 millones en el primer semestre, mientras que el negocio inmobiliario y asociado generó unas pérdidas acumuladas de 483 millones de euros.
La entidad también va a emprender un "firme plan" de reducción de costes para optimizar y adecuar la capacidad productiva al nivel de ingresos actual, que se encuentra "fuertemente presionado" por el entorno de tipos. "El modelo operativo resultantes estará focalizado en la eficiencia y la rentabilidad", explica el banco.
El banco prosiguió en el semestre reduciendo activos no productivos, tanto por el aumento de la venta de inmuebles como por la reducción del saldo de dudosos. Dichos activos no productivos descendieron en 740 millones de euros hasta junio, cifra que el Popular espera acelerar aún más en los próximos trimestres.
En los seis primeros meses del año, Popular ha vendido un total de 1.075 millones de euros en inmuebles, con un incremento del 50% respecto al primer trimestre en las ventas minoristas.