La revolución de los robots también llega al reparto de comida a domicilio de toda la vida. Unos nuevos robots, que miden 60 cm, serán los encargados de repartir los pedidos de comida a los clientes de Just Eat.
Los londinenses que pidan comida a domicilio a través de la aplicación Just Eat podrán conocer a los nuevos trabajadores de la empresa. Los robots de la cadena de comida rápida, que comenzarán a circular este verano, llevarán la comida del cliente desde el restaurante hasta su domicilio.
La ubicación y el trayecto de los robots, que funcionan con tecnología 3G para encontrar el domicilio del cliente, estarán controlados por trabajadores humanos desde una central con el fin de evitar altercados y ofrecer un buen servicio al cliente.
El robot, con una altura de 60 cm y 18 kilos de peso, emitirá una señal cuando se encuentre cerca de su destino para que el cliente pueda bajar a su portal a recoger la comida. El cliente, que habrá recibido un código en su móvil, deberá introducirlo en el robot para poder abrir la tapa.
Estos robots autónomos, que han sido desarrollados por Starship Technologies, tardan entre 5 y 30 minutos en llevar la comida hasta el cliente a una velocidad de unos 4 km por hora, según Quartz. Además, su coste es entre 10 y 15 veces más barato que el de los servicios a domicilio habituales.
Desde Just Eat solo harán uso de 6 de estos robots, capaces de cruzar las calles y de esquivar posibles obstáculos. Se han probado en Londres y en otras 3 ciudades europeas y, aunque sigue siendo un servicio en pruebas, ya han entregado más de 400.000 pedidos en Europa y EEUU, según The Daily Mail.