El Consejo de Ministros aprobó este viernes la concesión, a dos días del 1 de mayo, de 14 medallas de oro al Mérito en el Trabajo y entre los galardonados ha distinguido a los exsecretarios generales de UGT y CCOO, Cándido Méndez y José María Fidalgo. El motivo esgrimido por el gobierno para justificar su galardón ha sido la dedicación de ambos personajes a la gestión sindical en la búsqueda del dialogo social.
Un cirujano ortopediátrico
Ambos líderes sindicales han dejado las secretarías generales de los sindicatos de izquierdas. José María Fidalgo fue secretario general de CCOO desde 2000 a 2008. Desde su salida del sindicato, Fidalgo se ha dedicado al análisis y al estudio de la situación económica en España y las relaciones laborales colaborando activamente con fundaciones y think tanks como FAES o Institución Futuro. También participa en distintas tertulias de radio.
Se ha mostrado a favor del uso civil de la energía nuclear e incluso participó en seminarios de la Fundación FAES, vinculada al Partido Popular. Fue por ello muy criticado por algunas corrientes internas de CCOO (críticos y Alternativa Confederal), que le reprocharon la estrategia de concertación social y pactos políticos seguida por el sindicato, aunque dichas críticas siempre fueron minoritarias hasta que en el IX Congreso (2008), en la votación para un tercer mandato, fue derrotado por Ignacio Fernández Toxo por 512 votos frente a 484.
Fidalgo es médico de formación y ha sido sido especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatológica en el hospital madrileño de La Paz. Tras su salida de CCOO ha hecho algunos intentos de volver a la política. Incluso se planteó presentarse con UPyD a la Asamblea de Madrid y llegó a participar en foros del PP, aunque él siempre ha dejado claro que es "socialdemócrata".
Su vinculación con CCOO se remonta a 1977, cuando se afilió al sindicato. Los cargos orgánicos que ostentó hasta su nombramiento como secretario general fueron los de secretario general y como secretario confederal de política institucional.
Media vida viviendo del sindicato
La otra medalla de oro al mérito del trabajo la ha recibido el ya exsecretario general de UGT, Cándido Méndez. De Cándido se sabe que hizo el servicio militar obligatorio, del que guarda buenos recuerdos pese a que siempre dice que fue muy "duro" y que aprendió a esquiar e hizo de maestro.
Con 18 años se afilió al PSOE y a UGT, estudió ingeniero técnico industrial especializado en metalurgia, y se metió en el sindicato. Desde entonces, casi 40 años viviendo del sindicato hasta que el pasado mes de marzo fue sustituido por Josep María Álvarez. Ahora, a sus 64 años, Cándido Méndez recibe de un gobierno del PP la medalla de oro al mérito del trabajo.
Juan Roig
Otra de estas medallas, que se conceden con el fin de premiar el mérito de una conducta socialmente útil y ejemplar, ha recaído en el presidente de Mercadona, Juan Roig, como referente en el sector de la distribución en España y por su progresiva expansión que le ha llevado a generar 61.000 empleos.
Las medallas, concedidas a propuesta de la ministra de Empleo en funciones, Fátima Báñez, también han premiado a la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES) por su capacidad de interlocución con los poderes públicos, y al bailarín Víctor Ullate, por el compromiso social que le llevó a crear la Fundación para la Danza que lleva su nombre.
También han resultado galardonados el catedrático en Derecho del Trabajo e inspector Alfredo Montoya, elegido mejor laboralista español por la Asociación Nacional de Abogados Laboralistas; y la creadora de Infoempleo, María Benjumea, uno de los portales de internet más importantes de España con 4 millones de usuarios registrados.
Otra de los destacadas con este premio ha sido la presidenta de Galletas Gullón, María Teresa Rodríguez Sainz-Rozas, una empresa familiar fundada en 1892 que hoy es la primera empresa galletera española y genera un volumen de empleo de más de 900 personas.
También ha sido galardonado Mariano Puig Planas, responsable del Grupo Puig, una empresa familiar en sus inicios que hoy emplea a más de 4.000 personas y Alberto Palatchi Ribera, que convirtió una pequeña tienda de bordados en el Grupo Pronovias, con un volumen de empleo cercano a las 1.000 personas.
Otros premiados han sido: el presidente del Grupo Cosentino, Francisco Martínez-Cosentino, que convirtió la pequeña fábrica heredada de su padre en un de las empresas familiares más importantes de Andalucía; el presidente de Famadesa, Federico Beltrán Galindo, un grupo empresarial que genera mil empleos directos y la galerista Soledad Lorenzo García, que cedió su colección privada de arte al Museo Reina Sofía.
Otra de las medallas al mérito en el trabajo ha recaído en la Federación gallega de Redeiras Artesás "O Peirao" por su labor a favor del reconocimiento de quienes ponen a punto las redes de pesca, que antes no se consideraba un oficio, y su aportación al patrimonio cultural de Galicia.