La revolución tecnológica de los bancos y del sistema financiero ya ha llegado. Los bancos europeos y estadounidenses van a vivir su "momento Uber", una revolución fintech dentro de la industria, según un estudio publicado en el World Economic Forum.
Fintech, término que engloba a las empresas "financial technology", ha tenido un fuerte crecimiento en lo que se refiere a inversión durante los últimos años, mucho más acentuada durante 2015, llegando casi 20.000 millones de dólares (inversión privada).
Uno de sus efectos es que, como ya pasara con la llegada de los ordenadores a las empresas y la informatización de muchas tareas, se perderá un porcentaje importante de puestos de trabajo, que podría llegar hasta el 30% de los empleados de banca en 2025, según Citigroup, lo que supone un total de 1,8 millones empleos.
La inversión en fintech ha pasado de 1.800 millones de dólares en 2010 a 19.000 millones en 2015, un claro indicador de la fuerte repercusión de estas empresas en el mundo financiero y, sobre todo, en la banca tradicional.
Dentro de la inversión fintech podemos destacar la inversión en empresas del sector de pagos, donde los bancos encuentran una mayor competencia. Los consumidores son los que cambian sus preferencias, sus necesidades, por eso los bancos se han tenido que adaptar a través de nuevas aplicaciones móviles, operaciones online o pago contactless.
Si nos centramos en el impacto que tiene el fintech en los diferentes países encontramos casos totalmente opuestos. Por ejemplo, en Norte América solo el 1% de los bancos se han trasladado a los modelos digitales. El caso contrario lo encontramos en China, donde las compañías fintech han superado en clientes a los bancos tradicionales.