En el año 2010, terminaron sus estudios 197.535 personas, de las que el 60,2% eran mujeres y el 39,8%, hombres. En 2014, cuatro años después, su tasa de empleo era del 75,6% y su tasa de actividad del 93,6%, según el último estudio del INE sobre la Inserción Laboral de Titulados Universitarios.
En cuanto al desempleo, la tasa de paro cuatro años después de titularse se situaba en el 19,2%. El desempleo afectaba más a los más jóvenes (20,1% en los menores de 30 años, frente al 15,1% en los de 35 y más años) y a las mujeres (20,5% frente al 17,2% de los hombres).
Por tipo de universidad, de los 197.535 licenciados o graduados el 85,8% estudiaron en universidades públicas y el 14,2% en privadas.
A pesar de las grandes diferencias a la hora de elegir entre lo público y lo privado, los datos del INE desvelan que los estudiantes que se decantan por la privada obtienen un mejor resultado a la hora de entrar en el mercado laboral.
Por ejemplo, los titulados en las universidades privadas tenían en 2014 una tasa de paro siete puntos menor que los de las públicas (13,1% frente a 20,2%). Las menores diferencias se dieron en las ramas de Ciencias de la Salud y en Ingeniería y Arquitectura.
En la tabla anterior, también se observa como la tasa de empleo y la tasa de actividad son mayores en el caso de la universidad pública.
Respecto a la situación profesional, el 43,2% de los titulados universitarios en 2010 que estaban ocupados en 2014 era asalariado con contrato permanente, el 33,9% asalariado con contrato temporal, el 12% tenía un contrato en prácticas y el 10% era empresario o autónomo.
Haciendo una comparativa por tipo de universidad, el porcentaje de titulados asalariados con un contrato permanente era superior en las universidades privadas (48,8%) que en las públicas (42,2%). El porcentaje de empresarios o trabajadores independientes presentaba una trayectoria similar, era mayor en las privadas. En sentido contrario, los porcentajes de asalariados con contrato temporal y de trabajadores en prácticas, formación o becario eran superiores entre los titulados de las universidades públicas.
Sobrecualificación percibida
Por otro lado, tres de cada cuatro titulados universitarios del curso 2009-2010 ocupados en 2014 consideraban que estaban desarrollando en su trabajo tareas propias de un titulado universitario (incluido doctorado y postdoctorado). El 11,3% afirmaba que el nivel más apropiado era el de Titulado en Formación Profesional de Grado Superior y el 7,2% el de estudios de Bachillerato o Formación Profesional de Grado Medio.
Sin embargo, por tipo de universidad, el 73% de los que estudiaron en una pública y el 84,2% de los que lo hicieron en una privada consideraba que su puesto de trabajo se ajustaba a su nivel de formación.