El grupo automovilístico alemán Volkswagen (VW) informó el miércoles que, tras una revisión en profundidad, casi todos los vehículos que consideraba que podían tener problemas con las emisiones de CO2 cumplen los valores notificados y solo 36.000 muestran desviaciones. El grupo lo limita ahora a siete modelos, con un total de nueve versiones.
En un comunicado, VW expuso las conclusiones de los análisis realizados después de que hace un mes informara de que había detectado "irregularidades" en la certificación de emisiones de CO2 y que podía haber alrededor de 800.000 coches del grupo perjudicados.
"En las mediciones internas solo se han encontrado ligeras desviaciones en siete modelos", apuntó la empresa, que destacó que no se ha confirmado la sospecha de que se podían haber manipulado las cifras de consumo de carburante y señaló que no es necesario realizar modificaciones técnicas en los vehículos.
"El impacto negativo en los beneficios de 2.000 millones de euros que se había estimado en un principio no ha sido confirmado", añadió el grupo antes de precisar que cualquier riesgo económico, de carácter menor, será determinado cuando se realicen nuevos análisis.
0,5% del volumen total
Los modelos afectados son un Polo, un Scirocco, dos Jetta, dos Golf y tres Passat, con una producción anual de alrededor de 36.000 vehículos, un 0,5 % del total del volumen total de Volkswagen.
La compañía informó de que en los próximos días estas mediciones serán revisadas por las autoridades competentes y señaló que los modelos que han superado las pruebas podrán seguir en el mercado sin ningún problema.
Volkswagen ya ha entregado los resultados de sus informes a la comisión de investigación creada por el Gobierno alemán y a la Oficina Federal de Vehículos a Motor (KBA). Según dichos análisis, las desviaciones detectadas son de "pocos gramos de CO2", lo que se corresponde con un aumento del consumo de esos vehículos de alrededor de 0,1 o 0,2 litros cada 100 kilómetros.