Parecía una broma, pero va en serio. La nueva alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha empezado a preparar una moneda propia para la Ciudad Condal.
La líder de Barcelona en Comú incluyó esta medida en su programa electoral, como ya avanzó Libre Mercado. De hecho, Colau planteó la moneda local con la intención de "extenderla a otros municipios del área metropolitana" de la ciudad.
La moneda será digital y según la alcaldesa contribuirá a favorecer al comercio de proximidad. Después de un "proceso pedagógico" de seis meses durante los cuales se dará a conocer el proyecto a vecinos y comerciantes, Colau pondrá en marcha la divisa.
La Vanguardia da a conocer este miércoles más detalles del proyecto. La moneda digital se podrá cambiar por la moneda oficial en cualquier momento y los compradores operarán con ella a través de monederos electrónicos o dispositivos móviles.
El nombre de la moneda se decidirá más adelante mediante un proceso participativo.
Aunque el Gobierno de Barcelona en Comú insiste en que con su moneda propia favorecerán al pequeño y mediano comercio de la ciudad, no aportan ningún dato que respalde esta insólita excusa. El plan de Colau se parece más a una campaña publicitaria para Barcelona y todo apunta que el funcionamiento de su moneda funcionará más como las ediciones especiales que saca periódicamente la Casa de la Moneda, los Corticoles de El Corte Inglés o los Eurovips del Grupo Vips, ya que va a ser complicado que algún banco respalde una cifra importante de dinero con esa moneda.
De hecho, el Banco de España ya calificó hasta unos meses esta moneda de "imposible además de indeseable".