Los ganaderos europeos, incluidos los españoles, llevan semanas protestando por la caída que ha experimentado el precio de la leche en los últimos meses. Los productores se quejan de que, en muchos casos, el precio de mercado no alcanza para cubrir los costes, de modo que exigen medidas a los gobiernos para evitar el cierre de las explotaciones.
Entre otras opciones, se ha barajado la posibilidad de elevar el precio de intervención de la leche, pero Bruselas se decantó el lunes por subvencionar a los ganaderos con 500 millones de euros extra para hacer frente a las pérdidas.
Sin embargo, ¿qué factores explican el abaratamiento de la leche? La Comisión Europea cita, básicamente, tres elementos importantes a tener en cuenta:
- El veto comercial impuesto por Rusia a los alimentos procedentes de la UE a raíz del conflicto surgido en Ucrania.
- La débil demanda procedente de China y la caída de las ventas a otros países emergentes, golpeados por el descenso global de las materias primas.
- Y un exceso de oferta mundial de leche, con un aumento muy sustancial en todas las regiones productoras, desde Europa (+0,8% en el primer semestre de 2015) y EEUU (+1,6%) hasta Nueva Zelanda (+0,9%) y Australia (+2,5%).
La confluencia de estas variables ha presionado a la baja el precio de la leche en la UE, hasta el punto de que un litro de agua es, de media, más caro que uno de leche. El precio de la leche se ha reducido en las tiendas un 5% en lo que va de año, mientras que en el mercado mayorista el descenso supera el 20% desde mediados de 2014, hasta rondar los 0,30 dólares.
El embargo comercial de Rusia supuso un duro golpe para el sector, ya que era el primer destino de las exportaciones lácteas de la UE, representando casi el 32% de las exportaciones comunitarias de queso y el 24% de mantequilla. Pero a ello se le ha sumado la débil demanda de China, que es el mayor importador del mundo de leche, especialmente de leche en polvo.
Los ganaderos piden ahora la reintroducción de las cuotas lácteas de producción suprimidas a principios de este año para tratar de reequilibrar la oferta y, mediante la concesión de subvenciones, evitar el cierre de las explotaciones afectadas. Pero, dada la abundante oferta existente, "a menos que se reduzca la producción, el mercado se va a seguir deteriorando", advierte Romuald Schaber, representante de los productores de leche a nivel europeo.