Nacido en Buenos Aires, Andrés Oppenheimer es, desde hace años, uno de los intelectuales latinoamericanos más influyentes. Su programa semanal de televisión, Oppenheimer Presenta, se ha consolidado como un espacio de referencia para el análisis de la actualidad social, política y económica del continente americano.
El nuevo libro de Oppenheimer, ¡Crear o morir!, acaba de llegar a España. Publicado por la editorial Debate, es un canto al progreso y la innovación. Como plantea el autor, "hoy en día, la prosperidad de los países depende cada vez menos de sus recursos naturales y cada vez más de sus sistemas educativos y sus programas científicos y de innovación. Los países más exitosos son los que desarrollan las mejores mentes y exportan productos con mayor valor añadido".
La presentación europea del libro tuvo lugar ayer, en el Auditorio Espacio Telefónica de Madrid. Hablando de su obra, a Oppenheimer le gusta comparar "el modelo Kodak con el modelo Instagram. La primera, con décadas de historia, entró en quiebra por no innovar. La segunda, con menos de veinte empleados, se vendió por miles de millones de dólares".
Un mundo nuevo
"Estamos en un mundo nuevo, la economía del conocimiento es lo que más vale, el libro está lleno de casos de estudio que lo demuestran. No se trata solamente de grandes proyectos tecnológicos, como Apple, sino también hay otros campos en los que podemos comprobarlo. Un ejemplo es el cocinero peruano Gastón Acurio, que ha revolucionado la escena gastronómica del país y la región. He ahí el tipo de figuras que ayuda a llevarnos a un mundo más moderno e innovador", apunta Oppenheimer.
¿Es ese mundo que viene bueno en términos de bienestar? "Nuestros abuelos trabajaban 80-90 horas por semana, hoy la media es de 40-50 horas pero en países como Dinamarca estos niveles se acercan a ratios de 30 horas. El progreso no siempre es lineal, tiene altibajos, pero gracias a la innovación sí se puede decir que vivimos más y vivimos mejor", destacó Oppenheimer.
Por último, el periodista declaró que hay dos grandes aspectos que marcan la capacidad de innovación de toda economía:
- "En primer lugar, es necesaria una cultura de la innovación. Veneramos a futbolistas, cantantes, actores… pero no a los emprendedores, a los catalizadores de cambios tecnológicos… Una educación de calidad es clave para este aspecto. El mundo que viene necesita esa mejor formación".
- "En segundo lugar, tenemos que aprender a respetar el fracaso individual. En España y Latinoamérica castigamos a quienes no logran sus objetivos. Sin embargo, en Silicon Valley tienen claro que el éxito llega tras una cadena de fracasos: se habla del fracaso con orgullo, como experiencia de la que se puede y se debe aprender. Thomas Edison falló mil veces... pero acabó inventando la lámpara eléctrica. Henry Ford lanzó 19 coches sin éxito antes de transformar el mercado con el modelo T. No hay que crucificar a quienes fracasan con su empresa, las leyes de quiebras no pueden convertirles en parias"