Primer susto serio para los pensionistas griegos. La delicada situación financiera que sufre el Estado heleno ya se ha empezado a traducir en problemas para abonar prestaciones básicas, como es el caso de las pensiones. En concreto, según informa Financial Times, Atenas ha tenido graves dificultades para completar el pago a los cerca de 2 millones de jubilados helenos, llegando incluso a padecer ciertos retrasos debido a "problemas técnicos", según el Ejecutivo de Syriza.
El pasado martes, el principal fondo de la Seguridad Social, IKA, retrasó el pago de las pensiones durante casi ocho horas. "Fui al cajero automático por la mañana antes de ir al supermercado, pero el dinero no estaba allí...", dijo Sócrates Kambitoglou, un ingeniero civil jubilado. Dimitris Stratoulis, viceministro de la Seguridad Social, dijo que un "problema técnico" causó el retraso. Sin embargo, fuentes conocedoras de la situación, indicaron que en los fondos de pensiones estatales "todavía faltaban varios cientos de millones de euros en la mañana del martes". Los pagos se realizaron normalmente el miércoles, según fuentes financieras.
La incertidumbre es ya tan elevada que muchos pensionistas que se agolpaban a las puertas del Banco Nacional de Grecia, la entidad estatal que gestiona la mayor parte de los pagos de pensiones, optaron por retirar toda su pensión en cuanto la cobraron. "Normalmente, yo sólo retiro la mitad del dinero a final de mes, pero hoy me voy a llevar todo", dijo Sotiria Zlatini, exfuncionario de 75 años.
El Gobierno de Alexis Tsipras se está quedando sin liquidez debido a que rechaza poner en marcha las reformas y ajustes que exigen los socios de la zona euro para desbloquear el último tramo del rescate internacional, cuya cuantía ronda los 7.200 millones de euros.