Corría octubre de 2012 y Andorra acogía el Congreso SABIENS, dedicado a "historia censurada, espiritualidad, exociencias, política…". El ponente estrella de aquella reunión era el economista Santiago Niño Becerra, referente de cabecera para los asistentes a un cónclave en el que se habló de crisis, pero también "de ufólogos, contactados, extraterrestres y ovnis".
No hablamos de una presentación aislada. Unos años antes, en 2005, Niño Becerra se presentó en el Congreso de Astrología de Barcelona para impartir una conferencia sobre Las grandes crisis socioeconómicas en la era de Piscis, intervención en la que estuvo acompañado de Inma Fernández, la astróloga junto a quien publicó en 2002 un trabajo titulado La realidad astrológica del sistema capitalista.
Niño Becerra defendía por aquel entonces que, "entre 1938 y 1995, la economía mundial creció por el tránsito de Plutón por Leo (1938-1957), pasando luego a una fase de expansión con Plutón en Virgo (1957-1972), entrando a continuación en declive por el tránsito de Plutón en Libra (1972-1984) y, finalmente, contrayéndose con el tránsito de Plutón por Escorpio (1984-1995)".
El 'gurú de la catástrofe'
Por aquel entonces, coincidiendo con sus publicaciones dedicadas a la economía y la astrología, Niño Becerra afirmaba que la tasa de paro en España llegaría al 30%, al hilo de una crisis que no empezaría a remitir hasta el año 2020. Entre sus predicciones más sonadas está la de que el precio del barril de petróleo alcanzaría en 2015 los 250 dólares.
Este discurso pesimista sobre el rumbo de la economía le granjeó las críticas de la plataforma Cambio Social Ya, que analizó sus previsiones macroeconómicas con el objetivo de mostrar sus inconsistencias.
Al hilo de este estudio, vemos que Niño Becerra afirmaba en enero de 2009 que el PIB caería entre un -2,1% y un -2,7%, mientras que el IPC experimentaría una rebaja de entre el -1,5% y el -2%. No obstante, meses después planteaba otro escenario de predicciones muy distinto: el PIB pasaba ahora a una horquilla de entre el -3,8% y el -4%, mientras que la inflación se movía entre el -0,7% y el -0,9%.
Analizando la crisis griega que desencadenó las dificultades en la Eurozona, el economista apuntaba en 2012 que "los orígenes del desastre no se hallan en el país heleno, sino en EEUU, que a finales de los años 80 obligó al Planeta a firmar un pacto por el que el resto del mundo sostendría y financiaría su economía a cambio de que USA consumiera de ese resto del mundo todo lo que no pudiera venderse y comprarse entre sí".
En 2013, Niño Becerra volvía a las páginas de actualidad, esta vez con un elogio del "modelo rumano" como solución al problema del paro. En opinión del economista, "si toda la inmigración se fuera, la tasa de paro bajaría diez puntos". En este sentido, Rumanía era un ejemplo digno de mención: "Allí la tasa de paro es del 7,5%, porque la mitad de Rumanía está fuera de Rumanía".
El apoyo entusiasta a Podemos
A finales de 2014, el hoy catedrático de la Universidad Ramón Llull se deshizo en elogios hacia el borrador de programa económico que presentó Podemos el pasado noviembre. Niño Becerra denunció entonces que "el documento ha sido calificado de extremista y no lo es. Me he leído las 68 páginas y es ideal. Es imposible leerlo y no estar de acuerdo con lo que propone".
Niño Becerra ha ido más allá y, en enero de 2015, ha vuelto a referirse al documento, apuntando esta vez que "el programa económico de Podemos es fabuloso, absolutamente ganador y realizable", aunque haciendo la salvedad de que "no es posible llevarlo a la práctica en el sistema capitalista".