El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu -instructor del caso Bankia- pidió el pasado 2 diciembre al banco de inversiones francoestadounidense Lazard toda la información de la que dispusiese sobre la transferencia de más de 6 millones de euros que realizó en el año 2011 al expresidente de Bankia Rodrigo Rato.
Dicha trasferencia salió a la luz pública el pasado 16 de octubre cuando el fiscal Anticorrupción Alejandro Luzón preguntó a Rato por la misma durante el interrogatorio por el caso de las denominadas "tarjetas black".
En su declaración judicial, el exvicepresidente del Gobierno afirmó que dicha operación bancaria se enmarcaba dentro del "contrato que yo firmo en el año 2008 con Lazard por mi trabajo. Eran unos derechos sobre unas acciones que yo no podía comprar hasta que los derechos vencieran en el año 2011", añadió el expresidente de Bankia.
Al entender el juez Andreu que dicha operación bancaria podía resultar sospechosa solicitó, a través de un auto, a Lazard que le aclarase su relación contractual con Rodrigo Rato "con indicación de todos los conceptos abonados" e incluyendo además "cualquier otro producido con posterioridad a la extinción de su relación profesional".
Fuentes de la investigación consultadas por Libertad Digital confirman que tanto la entidad bancaria como el propio Rato declararon a Hacienda dicha operación en el año 2012. El exvicepresidente del Gobierno de Aznar explicó ante el juez que dicho dinero fue cobrado de manera adecuada y declarado legalmente al fisco.
Según ha podido saber este periódico, Rato así lo hizo a través de su Impuesto sobre las Rentas de las Personas Físicas (IRPF) del año 2012. Fuentes jurídicas consultadas explican que la investigación abierta por Andreu tendrá escaso recorrido jurídico después de que el imputado haya podido demostrar que la trasferencia de Lazard fue declarada con normalidad a la Agencia Tributaria.
Rodrigo Rato trabajó como asesor de Lazard hasta el año 2011 tras abandonar la dirección del Fondo Monetario Internacional.