El Comité de Empresa de Campofrío ha explicado este miércoles que de los 891 trabajadores directos de la planta burgalesa que ardió el pasado domingo ya se ha conseguido reubicar al 13%, es decir, 113 empleados, además de que ha anunciado que "en próximos días" comenzará la actividad "parcialmente" de Jamones Burgaleses, que cuenta con medio centenar de trabajadores.
Así consta en el comunicado emitido este miércoles por el Comité de Empresa después de haber mantenido la primera reunión con la dirección de la compañía para constituir la Mesa Negociadora del ERTE, que comenzará las reuniones de negociación el próximo 1 de diciembre, según ha confirmado a Europa Press Pablo Fraile, representante de los trabajadores burgaleses.
Asimismo, el Comité ha explicado que la empresa enviará una carta a todos y cada uno de los trabajadores de la planta afectada por el incendio del pasado domingo para informarles del proceso que tienen que seguir, además de que se ha habilitado una oficina en Mobusa para atender los asuntos personales de cada empleado.
Igualmente, se ha informado de que la Junta se ha puesto en contacto con las entidades financieras a través de las cuales Campofrío paga la nómina a sus empleados para realizar un acuerdo marco "para salvaguarda", en caso de impagos de préstamos hipotecarios por parte de los trabajadores", mientras que desde el Ministerio de Trabajo se está abordando la concesión de ayudas extraordinarias que no están aún concretadas.
El Comité de Empresa ha decidido celebrar concentraciones todos los días laborales, a las 11 horas, en la planta La Bureba que el pasado domingo quedó arrasada por el fuego, mientras que el domingo, 23 de noviembre, se ha convocado una concentración a las 12 horas, bajo el lema Que nadie ni nada nos cambie nuestra manera de vivir y que se celebrará en el lugar en el que nació el Grupo Campofrío en 1952, el Parque Félix Rodríguez de la Fuente.
Pablo Fraile ha manifestado su "optimismo" personal en este proceso ya que, tal y como ha explicado, "es una iniciativa personal" del presidente de Campofrío, Pedro Balve, que ha comprometido a todo el grupo para hacer la planta en Burgos, lo que le hace ser "optimista", y aunque ha reconocido que ahora se abre un proceso burocrático el objetivo es que en "año y medio haya una nueva planta funcionando".