El empresario Arturo Fernández, uno de los nombres que aparece en la lista de consejeros que utilizó las tarjetas B de Caja Madrid, ha dado explicaciones en el programa En Casa de Herrero de esRadio. El presidente de la patronal madrileña no quiso rehuir su responsabilidad y dijo que el caso "es una monstruosidad" y "execrable".
De este modo, Fernández indicó que ha devuelto el dinero y ha hecho una complementaria. "Si vale para algo quiero decir que jamás pensé que esos 37.000 euros fueran de una tarjeta opaca. No pensé que una entidad como Caja Madrid me diera una tarjeta opaca". En su opinión, "no lo sabía ni yo ni muchos de los 80 implicados". Aún así, añadió que "me parece que la gente tiene muchos motivos para pensar que esto es un tema escandaloso".
Sobre los gastos realizados, el también vicpresidente de la CEOE aseguró que utilizó la tarjeta "durante dos años y medio, nunca saqué dinero del cajero pero sí hice comidas principalmente". Sin embargo, sí admitió que "deberíamos haber pedido justificantes de algo pero yo pensaba que esto era completamente legal".
Por todo ello, Arturo Fernández indicó que "aquí tenemos todos alguna culpa". "Estoy indignado conmigo mismo, llevo toda la vida trabajando sacando adelante mi empresa y todas estas cosas a mí también me indignan", sentenció.
Fernández ha negado que vaya a dimitir al frente de la CEIM tal y como afirman varios medios de comunicación ya que afirmó que se someterá a un voto de confianza para seguir al frente de la patronal madrileña. "Creo que ganaré", aseguró. Además, también negó que vaya a dimitir como vicepresidente de la CEOE. "He tenido el apoyo del señor Rosell. Hay elecciones a final de mes por lo cual no tengo la necesidad de presentar mi dimisión sino que simplemente dejaré de ser vicepresidente primero", dijo.