La zona del euro frenó su crecimiento económico en septiembre respecto al mes anterior, según el índice adelantado PMI compuesto de la actividad total que elabora Markit.
Este índice se situó en el 52,3 en septiembre frente al 52,5 de agosto, lo que significa que, aunque continúa la expansión, el índice marca su segundo descenso consecutivo y la cifra más baja desde que comenzó el año. Un índice por encima del nivel 50 indica una expansión, mientras que por debajo significa una contracción.
Así, en el acumulado del tercer trimestre del año el índice se situó en el 52,9, la cifra trimestral más baja del año. Además, el índice PMI de actividad comercial del sector servicios de la zona del euro se situó en 52,8 (53,1 en agosto), alcanzando su mínima en los tres últimos meses.
El índice PMI del sector manufacturero fue 50,5 (50,7 en agosto), el mínimo en los catorce últimos meses, mientras que el de producción del sector manufacturero se situó en 51, permaneciendo sin cambios respecto al mes anterior.
Por países, Markit señala que el crecimiento más acelerado registrado en Alemania, impulsado por el sector servicios, fue contrarrestado por un persistente declive en Francia y por una ralentización del crecimiento del resto de la zona del euro. La actividad total alemana aumentó ligeramente, ya que el ritmo más rápido de expansión registrado en el sector servicios fue neutralizado por una desaceleración, casi hasta la paralización, del sector manufacturero.
Por su parte, la actividad económica se continuó contrayendo en Francia, con una intensificación del descenso de la actividad comercial y un inicio de caída del sector servicios, mientras que el manufacturero mostró una moderación de la contracción. En el resto de los países de la zona del euro, la actividad se ralentizó hasta marcar su mínima en los últimos seis meses.
Francia, estancada
En concreto, la economía francesa se estancó en el segundo trimestre de 2014, al igual que en los tres primeros meses el año, según los últimos datos el Instituto Nacional de Estadística de Francia (Insee), que confirman la estimación inicial publicada el 14 de agosto.
El gasto de los consumidores aumentó un 0,4% en el segundo trimestre, en contraste con la caída de seis décimas de los tres primeros meses de 2014, mientras que la formación de capital fijo acentuó su descenso desde el 0,9% al 1,1%. De esta manera, la demanda interior en su conjunto contribuyó positivamente en una décima a la evolución del PIB en el periodo comprendido entre abril y junio, después de restar 0,4 puntos porcentuales el trimestre anterior.
Por su parte, el sector exterior restó una décima al dato del PIB del segundo trimestre, después de no haber tenido ningún impacto en el dato del primero. Así, las importaciones ralentizaron su incremento, desde el 0,8% al 0,4%, aunque en menor medida que las exportaciones, que frenaron su aumento desde el 0,6% al 0,1%. Por otro lado, la variación de los stocks de las empresas registró una contribución neutra al crecimiento de la economía gala en el segundo trimestre, frente a la contribución positiva de cinco décimas del trimestre anterior.