El ministro español de Economía, Luis de Guindos, ha advertido este domingo una reunión de dos días de los ministros de Economía y presidentes de los bancos centrales del G20 en la ciudad australiana de Cairns, de que la economía española no es inmune a la desaceleración de la Eurozona, que a su parecer ha tenido un impacto tanto en los flujos comerciales como en las expectativas, informa Efe.
En esta reunión de Cairns, se ha rebajado la meta de crecimiento de la economía mundial del 2 al 1,8 % hasta el 2018, a raíz de las rebajas de las previsiones de crecimiento económico para este y el siguiente año, especialmente en la zona euro y Japón.
En una rueda de prensa al término de la cita, De Guindos ha explicado que los países del G20 hablaron de forma genérica sobre la eurozona, sin mencionar específicamente a las supuestas presiones contra Alemania para que haya mayores esfuerzos para impulsar el crecimiento en la zona euro. "No se ha especificado a ningún país en concreto, se ha expresado que hay desaceleración de la zona euro, lo que es una realidad", ha comentado De Guindos al enfatizar que si bien España ha logrado corregir sus "desequilibrios domésticos", el principal riesgo que afronta es "lo que puede ocurrir en el entorno europeo".
"Gran parte en el futuro de la economía española y del mantenimiento de la recuperación en España se juega en Europa, como no puede ser de otro modo", ha acotado el ministro al recordar que la economía española creció en un 0,6 % en el último trimestre frente a un crecimiento prácticamente nulo del continente.
Confianza en el BCE
En este contexto, el ministro confía en que las medidas que ha adoptado el Banco Central Europeo, como es la depreciación del euro que ha supuesto un impulso a las exportaciones españolas, y otras medidas estructurales por parte de los países puedan mejorar la situación.
El ministro también ha subrayado que el posible impacto de la situación de Cataluña en la economía no fue discutido en el seno del G20 al insistir en que "el actual signo de los tiempos es claro, que es compartir soberanía".
Otro de los asuntos claves en la reunión del G20 en Cairns fue la lucha contra la evasión tributaria por parte de las multinacionales que aprovechan los paraísos fiscales y el mayor intercambio de información bancaria para evitar la evasión fiscal.