La Comisión del Mercado de Valores (CMVM) portuguesa anunció este viernes el levantamiento de la suspensión del Banco Espírito Santo (BES), una vez que la entidad publicó "información relevante" sobre su situación financiera.
El regulador bursátil luso permitió así que la entidad volviese a cotizar en el principal índice de la Bolsa de Lisboa, el PSI-20, veinticuatro horas después de suspenderla debido a las crecientes dudas existentes en el mercado.
El BES precisó en un comunicado divulgado hoy de madrugada que su exposición al Grupo Espírito Santo -del que forma parte- alcanza los 1.180 millones de euros, y garantizó que cuenta con un colchón financiero suficiente para compensar hipotéticas pérdidas y mantener sus ratios de capital en los niveles exigidos
Caídas en las bolsas
Wall Street despertó este jueves bajo el temor de un nuevo Lehman Brothers. No es para menos. La suspensión de cotización del banco portugués Espírito Santo (BES) sucedía a un desplome del 17,24%, lo que amplía al 50% su depreciación desde finales de mayo.
Esta estrepitosa caída llevaba a la Bolsa de Lisboa a suspender la cotización de la entidad financiera, ante el temor a un contagio generalizado. Así, BES se convirtió en el epicentro de un seísmo que afectó a las bolsas de medio mundo. La plaza lusa se dejó un 4,18%, el resto de parqués europeos han sufrido fuertes caídas. El Ibex se dejaba casi un 2%, el Euro Stoxx 50 un 1,64 o el dax alemán un 1,52%. Al otro lado del Atlántico también cerraba con caídas, como sucedió en las bolsas asiáticas.
Los problemas empezaron para el banco luso cuando resultó presa de la incertidumbre tras retrasar esta semana el pago a algunos de los tenedores de deuda a corto plazo. Este retraso desató los temores sobre la estabilidad del Banco Espírito Santo y también sobre el resto del sector bancario. Algunos analistas temen que el BES tenga un agujero en sus cuentas de más de 1.300 millones de euros.
Pese a ello, el Banco de Portugal se ha adelantado a defender la "solidez" del Banco Espírito Santo (BES) que, tras la suspensión de la cotización, da por controlado "el riesgo de contagio". "La situación de solvencia de BES es sólida y ha sido significativamente reforzada con el reciente aumento de capital", indicó este portavoz de la institución lusa.
Sin embargo, no opina lo mismo el Fondo Monetario Internacional (FMI) que ha emitido un comunicado en el que reconoce que persisten "bolsas de vulnerabilidad" en el sistema bancario portugués, pero sin mencionar ninguna entidad en concreto. Según el FMI, el sistema bancario de Portugal ha sido capaz de soportar sin trastornos significativos, gracias en parte por el sustancial apoyo público recibido y las medidas extraordinarias desplegadas por el Banco Central Europeo (BCE), señaló la institución internacional.
"Sin embargo, como el Banco de Portugal reconoce, persisten bolsas de vulnerabilidad, que justifican medidas correctivas en algunos casos y una supervisión intrusiva en otros", añadió el FMI.
El miedo ante un "caso Gowex" a gran escala, en donde las cuentas no sean fidedignas, hacen temer una nueva crisis financiera que corte nuevamente el acceso al crédito a las empresas, propiciando un estancamiento de la crisis.
Ventas al descubierto
Además, la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM) de Portugal ha decidido prohibir temporalmente la realización de ventas al descubierto de acciones de Banco Espírito Santo (BES).
Ante esta fluctuación de las acciones de BES, la CMVM determinó "la prohibición de las ventas al descubierto de las acciones representativas del capital social de Banco Espírito Santo en Euronext Lisboa desde las 00:00 horas de este viernes hasta las 23:59 horas de hoy", informó el supervisor luso.
La CMVM precisó que esta medida se sustenta en la legislación que contempla la posibilidad de restringir temporalmente la venta al descubierto de instrumentos financieros en el caso de una significativa disminución del precio. La normativa lusa considera significativa una disminución del precio de al menos el 10%.
De este modo, el supervisor decidió el veto temporal a las ventas al descubierto "al tener en consideración que la disminución del precio de las acciones en relación con el precio del día inmediatamente anterior era del 17,24%" y al valorar que la fluctuación de las acciones "no puede excluirse un fenómeno especulativo con impacto negativo".