El próximo martes 6 de mayo se fundirán a negro nueve de los 24 canales de TDT para dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal Supremo, que anuló las concesiones que se realizaron durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero por haberse realizado sin haber mediado concurso público alguno.
Atresmedia suprimirá Nitro, LaSexta3 y Xplora; Mediaset apagará La Siete y La Nueve; Veo TV (liderado por Unidad Editorial) pasará AXN a las plataformas de pago y cerrará el canal que hace unos meses dejó de emitir Marca TV, mientras que Net TV (cuyo principal accionista es Vocento) cerrará dos canales de Teletienda, que recientemente han dejado de albergar Intereconomía y MTV.
Con el apagón de estos canales se materializará la anulación del acuerdo de Consejo de Ministros de 16 de julio de 2010, por el que se asignaba, directamente sin mediar concurso, un múltiple digital de cobertura estatal a cada una de las sociedades licenciatarias del servicio de televisión digital terrestre de ámbito estatal.
En noviembre de 2012, el alto tribunal decidió anular este acuerdo tras estimar en parte un recurso presentado por la empresa Infraestructuras y Gestión 2002 S.L. contra el acuerdo del Gobierno que consideraba que los beneficiarios de las licencias no disponían de título para la "explotación de los canales de televisión".
La empresa consideraba que el múltiple digital -integrado por cuatro canales digitales de televisión susceptibles de ser explotados las 24 horas del día- se otorgó "sin concurso", excluyendo así del mercado a "nuevos jugadores interesados en el servicio de prestación de televisión".
Y los magistrados coincidieron en que la aprobación de la Ley General de la Comunicación Audiovisual, en marzo de 2010, suponía un "nuevo régimen" audiovisual, que exige que la emisión obtenga licencias previas mediante concurso para la emisión de los canales.
La Unión de Televisiones Comerciales en Abierto (Uteca) ha recurrido la anulación al Tribunal Constitucional porque considera que se han vulnerado sus derechos y porque entiende que con esta decisión se sitúa a los operadores de televisión y, por extensión, a todo el sector audiovisual, en una situación de "inseguridad jurídica sin precedentes".
Pero hasta resolver el recurso, la patronal de las televisiones privadas pidió al tribunal que suspendiera cautelarmente la sentencia, cosa que no se ha producido y sobre la que se pronunció el pasado día 28 el tribunal sentenciador, que rechazó en un auto esta petición de los grupos de comunicación.
No obstante, el director de Uteca, Andrés Armas, ya advirtió la semana pasada que la asociación no descarta recurrir el cese de emisiones ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Armas, además, hizo hincapié en el derecho de cada uno de los canales a pedir indemnizaciones, máxime después de la "alarmante inacción" que la patronal considera que ha mantenido Industria ante este conflicto, que, a su juicio, se podría haber solventado con un real decreto ley que "enmendara los errores administrativos".
El hecho es que, a pesar de las cerca de 130.000 firmas que se han recogido a través de la plataforma de peticiones online Change.org contra el cierre, desde el martes serán 15 los canales de TDT que se puedan ver en abierto.
La incertidumbre será cuántos se podrán ver cuando entre en vigor el plan del dividendo digital para reubicar las emisiones de televisión en el espectro radioeléctrico, en concreto el 1 de enero de 2015.
Con este proceso se liberará la banda de 800 megahercios del espectro radioeléctrico que ahora ocupan los nueve canales de TDT que se apagarán el martes y por la que las compañías de telefonía desplegarán sus redes de cuarta generación (4G).
Y lo que quieren los operadores es que se comience a trabajar con urgencia en dicho plan -Industria ha asegurado recientemente que estará listo antes de junio- y que se blinde jurídicamente para que no se puedan poner en cuestión los canales concedidos.