El presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha afirmado este viernes que la recuperación de la economía española es un hecho, pero ha advertido de que aún queda "camino por recorrer", al tiempo que ha insistido en que la prioridad debe ser la creación de empleo, por lo que ni el Gobierno ni el sector privado deben caer en la complacencia.
Durante su intervención ante la junta de accionistas que se celebra en Santander, el presidente del grupo ha manifestado que a día de hoy nadie duda de la recuperación de la economía española, "que ha salido de la recesión, comienza a generar empleo y se encamina en el año 2014 a un crecimiento de más de un 1%".
"Esta mejora de la situación responde además a las reformas estructurales importantes que ya están dando sus frutos", ha indicado Botín, quien ha añadido que España ha salido con una valoración "muy favorable" del programa de ayuda financiera de la Troika.
El directivo también ha destacado que el país cuenta ahora con un sistema más sólido y competitivo, que posee una estructura más razonable, con menos entidades y más homogéneas. En este sentido, ha apuntado que España va a ser una de las noticias más positivas para el Santander en los próximos tres años, por lo que mantiene la previsión de que el grupo tendrá un beneficio de 3.000 millones de euros en 2016.
Así, Botín se mostró "muy optimista" sobre el futuro del grupo. "Contamos con un modelo de negocio y una diversificación únicas en la banca internacional. Tras unos años en los que la prioridad ha sido el reforzamiento del balance y de la posición de liquidez, estamos perfectamente preparados para abordar una nueva fase de crecimiento sostenido de nuestros beneficios", centrándose en:
- Reforzar la actividad comercial con los más de 100 millones de clientes en sus 10 grandes mercados. Para ello, segmentarán mejor los productos y servicios en función de las necesidades de sus clientes, con un foco especial en la calidad de servicio.
- Cuidar el control de los costes y la eficiencia para continuar siendo líderes dentro de la gran banca comercial internacional.
- Aprovechar todas las oportunidades competitivas que les proporcione la Unión Bancaria europea, dentro de lo que esperan "sea un campo de juego más equilibrado y uniforme".
"Muy pocos bancos internacionales tienen esta posición competitiva en momentos en los que los cambios en la regulación bancaria ponen en cuestión algunos modelos de negocio y ponen restricciones a algunas actividades de banca de inversión. Hemos
iniciado muy bien el año 2014 y en el transcurso de los próximos trimestres se irá viendo con claridad la tendencia favorable de nuestros resultados. Estoy convencido que esto se
reflejará en la cotización de nuestra acción", concluyó.