El Ibex 35 ha perdido la cota psicológica de los 10.000 puntos después de una jornada en la que el principal selectivo de la bolsa española ha perdido un 3,64%. La tensión provocada por la depreciación del peso argentino ha llevado al Ibex 35 a cerrar en los 9.868 puntos debido a la alta exposición de las empresas españolas a la economía latinoamericana. El selectivo logró superar los 10.000 puntos a inicios de este año.
La tensión se ha trasladado también a la prima de riesgo que ha escalado hasta los 214 puntos con la rentabilidad del bono en el 3,78%. Así, el principal selectivo de la bolsa española se ha dejado en la semana un 5,7% en sus peores cinco días desde septiembre de 2012.
El peso argentino sufrió ayer jueves la mayor devaluación de los últimos 12 años, cuando el país acusaba los efectos de una fuerte crisis económica en la que se abandonó la paridad con el dólar. En concreto, la moneda argentina llegó a anotarse una caída del 14% hasta rozar los 8,30 pesos por dólar.
El peso argentino, que en 2013 se depreció un 31%, acumula una caída del 18,86% en lo que va del año. Esta situación ha disparado los miedos del mercado, que azotan a todas las compañías instaladas en el país.
En medio del caos, el Gobierno argentino ha anunciado que permitirá a particulares adquirir divisa extranjera para tenencia y ahorro. "Hemos decidido autorizar la compra de dólares para tenencia y ahorro de personas físicas", ha anunciado el jefe de Gabinete de Gobierno, Jorge Capitanich. En concreto, se levantará la prohibición para la compra de divisas para ahorro y se reducirá al 20 por ciento -actualmente es el 35 - el impuesto que los argentinos deben pagar para adquirir moneda extranjera.
Capitanich argumentaba en su intervención que "esta decisión obedece a que en el marco de la política cambiaria de flotación administrada del tipo de cambio, el Gobierno considera que el precio de la divisa, es decir del dólar, ha alcanzado un nivel de convergencia aceptable para los objetivos de la política económica". Además, Capitanich, a lo largo de su intervención, destacó que la "la devaluación no ha sido inducida por el Estado, en definitiva para aquellos amantes del libre mercado, la oferta de divisas es la que se expresó ayer en el mercado de cambios", afirmó.
Las reservas de dólares se desploman
Sin embargo, el Ejecutivo de Kirchner ha reconocido que, a pesar de que el pasado miércoles los poderes públicos registraron una profunda caída de la moneda, el Banco Central no intervino comprando o vendiendo dólares, contrario a lo que suele ser su política habitual sobre el control de cambio. Esto produjo que, al no sostener la caída de la moneda, como es habitual, ésta se desplomó. El duro control cambiario, causante de esta situación, fue impuesto por Cristina Fernández de Kirchner a finales de 2011 para "frenar la fuga de capitales", lo que incluyó la compra de dólares para atesoramiento.
Argentina se encuentra ahora al acecho de dólares. Tal y como informa la BBC, las reservas en dólares del país descendieron durante el 2013 hasta en un 30%. Esta situación se ha debido a las políticas de cambio que obligaba al Banco Central a gastar dólares, para estabilizar así la moneda. Las reservas de dólares han descendido ya a los 29.000 millones, lo que acrecienta la deriva autárquica del país y cierra aún más la economía argentina al exterior.
Gran exposición en España
Para muchas de las grandes empresas españolas que operan en bolsa Argentina supone un importante mercado por lo que la exposición a estas tensiones monetarias ha provocado el pánico entre los inversores que se han decantado por las ventas. Mapfre ha liderado los recortes con una caída del 5,95%. Por su parte, BBVA se ha dejado un 5,14% y Telefónica un 4,55%.
El resto de principales plazas de Europa también se decantaba por las pérdidas, aunque ninguna superaba la registrada en el Ibex. Milán seguía al selectivo español con una caída del 1,6%.