El Tribunal Constitucional ha tumbado las restricciones que había establecido el gobierno catalán a la implantación y apertura de centros comerciales de una superficie superior a los 800 metros cuadrados, un fallo que la Generalidad tratará ahora de sortear.
Según publica este martes La Vanguardia, el Alto Tribunal ha fallado en contra de las restricciones legales introducidas por la normativa catalana por las cuales se limitaba la apertura de centros medianos (entre 800 y 1.300 metros cuadrados) a municipios de más de 5.000 habitantes o capitales de comarca, y las de grandes dimensiones (más de 2.500 metros) a municipios de 50.000 habitantes.
Fuentes del departamento de Empresa y Empleo, en cambio, subrayan que este fallo, que ha sido notificado al gobierno catalán, no cuestiona la legislación catalana en materia de equipamientos comerciales.
Por ello, la Generalidad tratará de sortear este fallo del Tribunal Constitucional y aprovechará la tramitación de la ley de acompañamiento de los presupuestos para 2014 para derogar simplemente la parte de la ley de promoción económica de Cataluña que se refiere a esta cuestión.
En cualquier caso, estas fuentes aclaran que seguirá en vigor la normativa de ordenación de equipamientos comerciales, con lo que entienden que la Generalidad podrá seguir regulando según su criterio todo lo referente a la implantación de grandes superficies en su territorio