Una de las principales enfermedades de la economía argentina es su inflación crónica. Las subidas de los precios de los productos básicos son continuas, por ejemplo, en tan sólo una semana el litro de leche puede variar más de 20%. Sin embargo, el gobierno kirchnerista sigue sin aceptar la tasa real de inflación del país. Durante los últimos años la estadística oficial, facilitada por el organismo público INDEC, dista mucho de la subida de precios real que sienten los argentinos. Mientras el INDEC señala una inflación de en torno un 10%, muchos organismos internacionales y analistas privados calculan que la subida del precio es más del doble.
Cristina Fernández de Kirchner, presidenta del Gobierno, llegó a decir hace unos meses que "la inflación no es un fenómeno de la naturaleza o del Gobierno". En otras ocasiones criticó a la prensa de publicar las estadísticas de organismos internacionales que cifran la inflación del país latinoamericano en el 25%. De hecho, la presidenta argentina tildó de disparate estas cifras ya que "si la inflación fuese del 25% el país estallaría".
El último en negar la subida generalizada de los precios de consumo fue Guillermo Moreno, secretario de comercio, que se preguntaba hace apenas unos días "de qué inflación estamos hablando, si la carne no sube hace tres años". Bastaron las palabras del político kirchnerista para que el alimento más popular para los argentinos subiese un 10% en la última semana, según publica el diario Clarín.
Desde principios de mes en el Mercado de Liniers, donde cotiza la carne argentina, el kilo vivo de novillo aumentó de 9,96 a 10,86 pesos. Comparando con un mes atrás, las variaciones fueron de hasta el 14%. Y si se toman los últimos 90 días la categoría vacas acumuló el máximo incremento, con 33%, según el diario argentino.
Algunos cortes más populares se disparan un 200%
Pese a que Moreno considera que los precios de la carne se mantienen congelados, desde enero de 2010 han aumentado casi un 200% en los cortes de carne más populares como el osobuco, según los números del Instituto de Promoción de la carne vacuna argentina (Ipcva).
El osobuco, según el diario Cronista, subió desde enero de 2010 un 197%. Otra de las zonas que más incrementó su precio en este periodo fue la zona de la falda de la vaca, con un incremento del 164%. Los cortes más populares fueron las que más subieron, por el "mayor aumento de la demanda" han explicado algunos expertos.
Según los datos oficiales disponibles, entre enero y setiembre el consumo per cápita se ubicó en 63,5 kilos, cuando en igual periodo de 2012 había sido de 59 kilos. Es decir, actualmente cada argentino come casi 5 kilos más de carne que hace un año. Y esto sin contar que el consumo de pollos también fue récord, con cerca de 44 kilos por habitante.