Las exportaciones españolas están en niveles de récord. Hasta el pasado julio, el déficit comercial se reducía más de un 67% en los seis primeros meses del año y sumaba 6.611,1 millones, aproximadamente un tercio del nivel registrado en el mismo periodo de 2012. Todo gracias unas exportaciones que alcanzaron un nuevo máximo en la serie histórica de 138.583 millones de euros, un 8% más, y la mejor cifra en un semestre desde 1971. Tanto es así que España registra desde mayo superávit comercial.
Este buen comportamiento de las exportaciones se debe, casi en su totalidad, a la competitividad que ha logrado la industria española. Así se lo ha recordado el sector en una carta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, donde expresan su fuerte preocupación por los precios de la energía.
El sector ha logrado incrementar las exportaciones porque han logrado ajustar los costes hasta alcanzar unos precios muy competitivos. Pero la reducción de costes ha alcanzado unos niveles críticos. Así, las industrias exportadoras advierten al ejecutivo que existe un verdadero riesgo de "colapso". Tal y como recuerda el sector, "se ha exportado porque la industria ha ajustado enormemente sus márgenes en las ventas al exterior, por lo que no puede soportar incrementos de costos como los eléctricos". Éste es uno de los problemas que más preocupa a la industria.
Así, recuerdan al Gobierno que "los subsidios a las energías renovables y la cogeneración en los últimos 5 años (2009-2013) han sido de 39.656 millones de euros", lo que significa que, de seguir así, ("incluso con las recientes reformas") en los próximos siete años "los subsidios alcanzarán más de 70.000 millones de euros". Además, con este ritmo, sólo en 2013 estos costes ya serán de 10.500 millones. A esto hay que sumar que las tecnologías solares (fotovoltaica y termosolar) que cuestan otros 5.000 millones de euros anuales.
El sector estima que estas tecnologías van a encarecer la factura eléctrica hasta los 38.000 millones de euros al año, de los que 10.500 millones son subsidios y 8.500 millones, impuestos. Así, solicitan al Ejecutivo la paralización de la producción de las tecnologías solares existentes y que durante 10 años no se construyan más renovables. También exigen la reducción de las primas a las renovables y a la cogeneración. Con todo se alcanzarían unos ahorros que alcanzarían los 7.000 millones de euros anuales.
Al mismo tiempo, recuerdan la moratoria nuclear para dejar claro que los inversores "deben recuperar totalmente su inversión y habrá que pagarla, pero no la disparatada producción". En cuanto a los problemas de suministro, el sector lo tiene claro: "Sobra capacidad. Tenemos 107.600 MW y la demanda máxima ha sido de 43.500 MW", por lo que piden al Gobierno que paralice la construcción de nuevas plantas.