El consejero delegado del Banco Santander, Javier Marín, ha avanzado que la entidad confía en poder generar en España un beneficio antes de impuestos de 3.000 millones de euros hasta 2016, una estimación fundamentada sobre todo en una normalización de las provisiones. Así lo ha puesto de manifiesto Marín durante su exposición en la conferencia de inversores que celebra en Londres, organizada por Merrill Lynch.
El 'número dos' del Santander ha dibujado los "tres cambios necesarios" en la estrategia de la entidad: mejora de la rentabilidad del capital invertido, la eficiencia de costes y la mejora de ingresos aprovechando las integraciones de filiales, caso de Banesto y Banif.
De los 3.000 millones potenciales que Santander podría generar entre 2012 y 2016, Marín ha especificado que 2.000 millones procederían de la normalización de las provisiones, 420 millones de sinergias de integraciones, 500 millones por mejora de márgenes y de cuota de depósitos y entre 300 y 400 millones de otras iniciativas destinadas a ajustes adicionales de costes.
En las transparencias de la exposición ante los inversores, facilitadas por la entidad, Marín ha explicado esta previsión bajo el epígrafe: "España: un gran cambio esperado". El consejero delegado del banco también ha puesto en valor la estrategia enfocada a los segmentos de mercado más atractivos, fundamentalmente pymes y banca privada.
Retos para volver a la rentabilidad
Marín también ha subrayado la necesidad de adaptarse "al nuevo mundo" aprovechando las ventajas de un grupo de economías de escala. El consejero delegado del Santander ha aprovechado para subrayar la posición de capital de la entidad ante los test de estrés a nivel europeo previstos para la primera mitad de 2014.