El paro y el déficit crecientes están poniendo a prueba las políticas del Gobierno holandés, que hoy anunció nuevas medidas de ahorro por valor de 6.000 millones de euros y que avanzó cambios en el tradicional Estado del bienestar.
Los nuevos recortes se suman a los 46.000 millones de euros de ajustes que Holanda ha aprobado desde 2010, cuando el liberal Mark Rutte empezó su primera legislatura, y responden a los problemas para controlar el déficit público, que según los últimos pronósticos alcanzará en 2014 el 3,3 por ciento del PIB.
El anuncio oficial de las medidas de austeridad fue hecho por el rey Guillermo-Alejandro en el tradicional discurso de la Corona, el cual, a pesar de ser leído por el monarca, contiene las directrices legislativas del Ejecutivo en la apertura del año parlamentario.
El monarca, en su primer discurso de este tipo, explicó que para el Gobierno el "clásico Estado del bienestar" se está transformando en una "sociedad participativa" en la que los ciudadanos aumentan la responsabilidad sobre sus propias vidas.
Sanidad, pensiones y mercado inmobiliario
El rey se refirió también a sectores como la sanidad, las pensiones y el mercado inmobiliario en Holanda como los que necesitan reformas para poder garantizar su sostenibilidad.
En su discurso habló también de "señales prudentes" de recuperación de la crisis, para lo cual el Gobierno reserva "varios miles de millones" para proyectos de inversión en sectores como la educación y la construcción.
A pesar de los recortes, la economía holandesa no acaba de despuntar, con una cifra de paro que se estima aumentará hasta el 7,5% de la población activa en 2014 (respecto al 7 por ciento estimado para finales de 2013).
También el poder adquisitivo de los holandeses bajará en un 0,5% en 2014, lo cual afecta negativamente a la confianza de los consumidores, según las últimas previsiones.
El ministro de Finanzas holandés y presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, reconoció que los presupuestos presentados este martes "no son como para festejar", pero defendió que la perspectiva de su Gobierno "es la única vía para una recuperación económica sostenible".
También el primer ministro Rutte dijo en una entrevista a la televisión pública NOS estar "convencido" de que su Gobierno aplica las políticas adecuadas para poder salir de la crisis de forma realista.
Laboristas y liberales en el Gobierno cuentan con una mayoría de 79 escaños en un Parlamento de 150 asientos, pero están en minoría en el Senado, y su actual política económica es rechazada por un 80 por ciento de los holandeses, según los sondeos presentados hoy por el canal NOS.
En su primer discurso de la Corona, el rey Guillermo-Alejandro, vestido de civil, aportó comentarios personales referidos a la "calidez" ofrecida por la sociedad durante su coronación el pasado 30 de abril y a la "sensación de unidad" experimentada en su familia tras la muerte del príncipe Friso, el pasado mes de agosto.
La reina Máxima, con un vestido largo color oro y sombrero y pendientes a juego, siguió el discurso de su esposo sentada en un trono al lado del monarca.