El déficit de tarifa, que se produce porque los ingresos del sistema eléctrico son inferiores a los costes de la actividad regulada, se situó en los siete primeros meses del año en 4.100 millones, un 20,4% por encima de lo previsto y un 5,4% superior al del mismo periodo del año anterior, según consta en la séptima liquidación mensual realizada por la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
El importe del desajuste supera en más de 500 millones los 3.593 millones de déficit acumulado hasta junio, a pesar de que la CNE ya ha incluido un ingreso de 426 millones por los nuevos impuestos eléctricos y de 61,8 millones por los derechos de emisión de CO2.
La tarifa eléctrica también recibió durante los primeros meses del año una inyección de 709 millones procedentes del Fondo de Amortización de la Deuda Eléctrica (Fade), sin la cual el desajuste hasta julio sería ahora un 40% superior a lo previsto.
Pese a la magnitud del descuadre, el Ministerio de Industria confía en cerrar 2013 sin déficit, para lo que espera ingresar unos 2.500 millones más de impuestos eléctricos y recibir el préstamo extraordinario de 2.200 millones. Además, transferirá 900 millones de las extrapeninsulares a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) e ingresará 400 millones adicionales por la subida de la luz del 3,2% en agosto.
Ya en 2014 comenzará a aplicarse el resto de las medidas de la reforma energética, entre ellas el nuevo esquema de retribución al transporte, distribución y renovables, en el que se garantiza en este último caso una rentabilidad del 7,5% antes de impuestos a partir de los costes de inversión y de toda la vida útil de la instalación.
Las primas al régimen especial, indica la CNE en su informe, ascendieron a 6.356 millones de euros hasta julio, lo que supone un incremento del 12% con respecto a lo previsto y del 14% con respecto al mismo periodo del año anterior.