La sostenibilidad de las televisiones autonómicas pende de un hilo. Los ingresos publicitarios de las televisiones públicas cayeron un 32,6% el año pasado, hasta sumar 129,61 millones de euros. Además, las subvenciones por parte de administraciones públicas a sus televisiones y radios también se redujeron un 3,8%, aunque continúan representado la gran mayoría de sus ingresos. Dichos entes ingresaron vía subvenciones un total de 2.019,13 millones de euros en 2012, frente a los 2.099,42 millones del año anterior.
Y mientras, los canales locales siguen perdiendo audiencia. En el caso de cadenas tan populares como Telemadrid o Canal Nou, sus cuotas de pantalla no superan el 5%, mientras que en 2008 tenían el 10%. Actualmente, en España hay un total de 13 televisiones regionales que emiten en Galicia, Comunidad Valenciana, Cataluña, País Vasco, Canarias, Madrid, Castilla-La Mancha, Andalucía, Baleares, Murcia, Asturias, Aragón y Extremadura. Del todas ellas, sólo la catalana TV3, la vasca ETB y la gallega TVG consiguen un share superior al 10%.
En abril de 2012, el Gobierno aprobó una modificación de la Ley General de Comunicación Audiovisual que permitía a los gobiernos autonómicos que lo desearan privatizar las televisiones públicas regionales. La Comunidad Valenciana, Madrid y Castilla-La Mancha, hicieron públicas sus intenciones de deshacerse de parte sus canales cómo fórmula de ahorro, pero casi un año y medio después ninguna lo ha conseguido. Y es que los inversores no encuentran ningún atractivo en los canales regionales, ya que intentar salvar su grave situación financiera es un riesgo que no están dispuestos a correr.
Un coste de casi 2.000 millones
Los que sí están obligados a seguir sosteniendo estos canales son los contribuyentes. Casi 1.000 millones al año le cuestan las televisiones públicas a los españoles en subvenciones. Pero los representantes regionales siguen sin mostrar ninguna intención de reducir de forma significativa las aportaciones a sus canales, a pesar de que las CCAA tienen que realizar importantes recortes del gasto para cumplir con el déficit.
- TV3: en la lista de los 'números rojos', es la catalana TV3 la que se lleva el primer puesto, ya que cerró 2012 con un déficit de 7,4 millones, lo que elevó a 738 millones sus pérdidas acumuladas hasta diciembre de 2012. Y esto a pesar de que el Gobierno catalán le otorgó subvenciones de 292 millones de euros para garantizar su supervivencia, la cifra más alta del total de televisiones públicas.
- Canal Sur: otra de las cadenas que más caras le salen a los contribuyentes, ya que acumula unas pérdidas de 1.000 millones en los últimos 5 años, informa el diario Expansión.
- Telemadrid: recibe 70 millones al año en subvenciones, pero perdió cerca de 115 millones en 2012.
- RTVV: la televisión pública valenciana lleva acumulada una deuda de 1.000 millones hasta 2011, año en que se anotó unas pérdidas de 171 millones y último ejercicio en que se han publicado sus cuentas.