El ministro de Economía, Luis De Guindos, ha mostrado su convencimiento de que "la recesión ha quedado atrás" y de que en los próximos trimestres habrá crecimiento de la economía, al tiempo que ha instado a cuidar la recuperación como si fuese una "pequeña flor de invernadero".
"La cuestión ahora es cuán intensa va a ser", ha dicho el ministro en una entrevista al diario El País, en la que asegura que la recuperación es una "realidad" aunque no está "garantizado que sea una planta frondosa", por lo que ha abogado por "evitar una salida en falso de la recesión".
De Guindos ha subrayado que "la economía española está ganando muchísima competitividad" gracias a la combinación de moderación salarial y ganancias de productividad ligadas a la flexibilidad.
Asimismo, ha recalcado que ha emprendido una dirección "distinta", en la que "no se va a vivir del crédito" y habrá "menos posibilidades de recursos públicos y más competitividad y productividad".
Impuestos
El ministro ha avanzado que a partir de ahora "no va a haber más subidas de impuestos, más allá de lo que son reajustes específicos y concretos de modificaciones puntuales", y ha concretado que la reforma se centrará en el IRPF, con el compromiso del Gobierno de revertir la subida de 2011. Es decir, que De Guindos mantiene aquel discurso de "tocar" los impuestos, no subirlos, aunque se traduzca finalmente en mayor carga impositiva para el contribuyente.
En este sentido, ha dicho que el Gobierno no subirá los actuales tipos del IVA, aunque habrá productos que pasarán del reducido al general porque "esos son retoques que siempre se han producido, a veces por la normativa comunitaria y no serán importantes".
Rescate
De Guindos ha descartado solicitar en otoño una ampliación de la ayuda al sector bancario concedida el pasado año, sin la que "España habría acabado rescatada", porque las dudas sobre el mismo se han despejado y el Tesoro se financia en los mercados.
Además, ha negado "la más mínima connivencia entre el Gobierno" y la banca y ha dicho que es el "único que ha limitado el sueldo a los banqueros, ha obligado a provisionar 87.000 millones y no va a regalar nada a nadie".
Preguntado por si los últimos escándalos corrupción pueden dañar la imagen de España en el exterior, de Guindos ha considerado que no están "teniendo efecto" atendiendo a los mercados, la prima de riesgo o la Bolsa y ha hecho hincapié en que lo que importa es que "España tiene un Gobierno estable".
Corrupción
"A mí la corrupción no me preocupa desde el punto de vista de los mercados financieros, sino del ciudadano español", y ha agregado que "si hay una persona que yo he visto que es siempre respetuosa con el principio de legalidad y que es independiente de todo tipo de influencias es el presidente del Gobierno. Yo no voy a poner la mano en el fuego por él porque no lo necesita"