El secretario general del sindicato de técnicos de Hacienda (GESTHA), José María Mollinedo, ha comentado en esRadio la dimisión de la directora de la Agencia Tributaria, Beatriz Viana, y su sustitución por Santiago Menéndez.
Mollinedo ha señalado que "no es tan importante que sea una dimisión o un cese" porque "en realidad es el Gobierno el que la ha aceptado". Sin embargo cree que lo que habría que plantearse el "por qué" tanto de su dimisión como de la postura del Ejecutivo. El secretario general de GESTHA ha indicado que "toda la plantilla en la Agencia Tributaria" considera que la dimisión de Beatriz Viana "tiene bastante que ver con una gestión no demasiado ágil, rápida ni clara" sobre los errores que se le imputaron a la infanta Cristina.
La dimisión de la directora de la Agencia Tributaria podría ser "una salida política" para "apagar el clamor que parte de la sociedad no considera que un error de esta naturaleza se haya cometido" ha afirmado José María Mollinedo. El secretario general de GESTHA ha dicho que realmente "no ha sido un simple error" sino de "una sucesión de errores" sumada a "una actitud no aclarada". En este sentido Mollinedo ha opinado que también es posible que Beatriz Viana "haya planteado esta solución" para "salvar la cara de Cristóbal Montoro".
Las tres lagunas importantes
El secretario general de GESTHA ha explicado que los errores que se cometieron "no son errores nimios" porque todo empieza cuando envían al juez Castro "una información errónea" que afecta a "personas significadas". Por ese motivo "no se entiende" cómo se pudo cometer el error "si se estaban revisando todos los informes".
Además José María Mollinedo ha revelado que "hay tres lagunas importantes para aclarar en este asunto" y Santiago Menéndez, el nuevo director de la Agencia Tributaria, estará "encomendado para que se ofrezca una versión definitiva sobre este asunto".
La primera de estas lagunas que tienen que aclarar es "si los presuntos errores administrativos han sido humanos o informáticos" y "no se ha dicho bajo qué responsabilidad se han permitido". La segunda es "cómo la Agencia Tributaria no requirió a la infanta que completara las ganancias patrimoniales que no había declarado por esas viviendas" y la última sería "cómo el delegado de la Agencia Tributaria de Cataluña rebajó la petición del informe" y la calificó "como una simple solicitud de información".