La liberalización total del comercio español está un pasito más cerca. Aún queda mucho, pero esos trámites, barreras y regulaciones absurdas que se presentan como un enorme muro que tiene que superar aquel empresario español que quiera abrir una tiendecita serán a partir de ahora un poco más bajos.
La nueva Ley de Emprendedores que prepara el Gobierno incluye un apartado dedicado a la regulación comercial, un segmento en el que Jaime García-Legaz, secretario de Estado del ramo, parece decidido a avanzar, poco a poco, en el camino de la liberalización. De hecho, éste es uno de los aspectos en los que se está cumpliendo con más rapidez el programa electoral del PP.
A mediados de 2012, el Gobierno dio el primer paso en este sentido, con la aprobación de un Decreto Ley que liberalizaba los horarios. Todos los comercios de menos de 300 m2 tendrían plena libertad para abrir cuándo quisieran. Y se acababa con las rebajas como un período de tiempo definido que nadie podía saltarse. Además, las grandes superficies tenían más margen y se establecían las zonas de gran afluencia turística, que incluye a los 14 municipios más grandes de España, en las que hay plena libertad de apertura.
Esto llegó más al público, pero quizás incluso tuvo más calado la segunda reforma, que aprobó la llamada licencia exprés. Tras este cambio, cualquiera que quisiera poner un comercio de menos de 300 metros cuadrados y que estuviera dentro de una amplia gama de actividades, podía hacerlo sin necesidad de la licencia previa municipal. Sólo sería obligatoria una declaración responsable del empresario en la que afirmaba que cumplía con todos los requisitos impuestos por el ayuntamiento para esa actividad. Luego, será el inspector municipal el que tenga que acudir al local a comprobar que está todo OK. En la práctica, esto hace muy fácil abrir una tienda (y no está habiendo, ni mucho menos, una catarata de cierres de ayuntamientos a empresarios que se saltaban las normas y abrían de cualquier manera).
Otro paso adelante
Ahora, Economía anuncia otro paso adelante. En realidad, podríamos decir que lo que el Ministerio quiere es ampliar el campo de juego. Y es que en la ley aprobada en 2012, se daba el plazo de un año para analizar la medida. Viendo cómo ha salido todo (con casi 7.000 nuevos locales atribuibles directamente a la norma), la intención es que haya más empresarios que puedan beneficiarse.
Por eso, en el Anteproyecto de Ley de Emprendedores (que debería estar aprobado en Cortes para comienzos del otoño), se recoge que en todas las actividades indicadas anteriormente se amplía la superficie que permite acogerse a estas ventajas. De 300 m2 como máximo, hasta los 500 m2. Y además, se abre aún más el abanico de las especialidades. Si en el RDL de 2012 eran casi todas actividades comerciales, la nueva Ley recogerá también a pequeñas industrias y a servicios complementarios del comercio (ver listado al final del artículo).
Con este avance, prácticamente todos los pequeños y medianos comercios españoles estarán cubiertos y podrán beneficiarse de los beneficios descritos anteriormente (licencia exprés), con lo que eso tiene de dinamización de un sector que cuenta con 1,8 millones de empleados y aporta el 5% del PIB a la economía española. Sólo permanecen al margen las grandes superficies, algunas tiendas que, por razón del producto, requieren autorización previa (armas, animales,…) y la hostelería.
Liberalización total
La pregunta es cuánto queda para la liberalización total del sector, grandes superficies y hostelería fundamentalmente. En la secretaría de Estado creen que van por el buen camino y que poco a poco se están dando pasos casi irreversibles en el futuro. Además, en la práctica, muchas de estas normas que pueden parecer parciales, cubren casi todos los casos reales.
Además, hay que tener en cuenta que tanto en lo que hace referencia a liberalización de horarios como a las licencias municipales, lo que establece la ley son los mínimos que las autonomías no pueden saltarse. Si hay regiones (como Madrid, por ejemplo) que quieren ir mucho más allá, tienen la puerta abierta. Y como poco a poco se están sumando más comunidades, al final serán las menos las que mantengan restricciones. En este sentido, el objetivo es ir ganando poco a poco más margen a las comunidades, "pactando" aseguran desde Economía, pero manteniendo esta línea liberalizado.
Sin embargo, hay dos grandes caballos de batalla, a los que el equipo de Legaz se tendrá que enfrentar. En primer lugar, las grandes superficies siguen estando, en determinadas regiones, muy penalizadas. Por otro lado, algunas actividades mantienen sin cambios el requisito del permiso previo municipal. Respecto a lo primero, la pretensión es ir negociando con las autonomías y que el efecto imitación y las cifras de los que han liberalizado, empujen a los renuentes.
En lo que hace referencia a la hostelería, los empresarios asumen que será complicado eliminar la licencia propia de los ayuntamientos. Estas actividades tienen problemas asociados (como ruidos, basuras o salidas de humos) que pueden ser polémicos con los vecinos y que los equipos municipales no quieren soltar. Por eso, la idea no sería tanto eliminar el requisito de licencia previa, sino imponer límites y plazos, que no permitan que un empresario se tire 2 años para abrir un bar.
En Economía, admiten que todavía no hay "nada", pero que su intención es llevarlo a la "próxima conferencia sectorial", para estudiar "qué tipo de fórmula" se puede aplicar. Una posibilidad sería implantar el "silencio positivo" (es decir, si no hay respuesta en un determinado plazo, se entiende aprobada la solicitud), pero no gusta demasiado en los ayuntamientos: "Estamos buscando un acuerdo. No es bueno para nadie que un local tarde dos años en obtener una licencia. Ni para el local, ni para el empleo, no para el ayuntamiento, que pierde los impuestos correspondientes. Tenemos que buscar alguna fórmula".
Listado de actividades
- Dentro del ámbito de aplicación de la Ley 12/2012:
- Comercio minorista: alimentación, textil confección, textil hogar, peletería, herbolario, perfumería, droguería, equipamiento del hogar, peletería, muebles, aparatos eléctricos, ferretería, material de construcción, bricolaje, venta de automóviles y accesorios, óptica, ortopedia, instrumentos musicales, antigüedades, librería, papelería, juguetería, joyería, plantas y reparaciones (quedan excluidas las farmacias, que necesitan un permiso especial).
- Pequeña industria: calzado y textil.
- Servicios: agencias de viaje, promoción inmobiliaria, tintorerías, reparación de ropa y zurcido, reparación de calzado, peluquerías, servicios fotográficos, fotocopias, enmarcación.
- Nueva ampliación (hasta 43 actividades)
- Industria: sector textil, industria artes gráficas y papel, talleres de joyería, bisutería y orfebrería.
- Comercio: supermercados hasta 500 m2, comercio en régimen de expositores, artículos para fumadores (no tabaco), reparación de aparatos electrodomésticos y fotografía
- Servicios: jurídicos, financieros, ingeniería, arquitectura, delineal, publicidad, relaciones públicas, reproducción de documentos, traducción, gestorías, alquiler de vehículos, enseñanza, cultura (venta de entradas), agencias de servicios, funerarias y matrimoniales.