La industria del automóvil se convierte en una palanca clave para la salida de la crisis. Así lo asegura el Gobierno, que aporta cifras convincentes. Este mismo viernes, el presidente anunció una nueva "oleada de inversiones" por importe de más de mil millones de euros del sector en el país. Lo hizo en el transcurso de un almuerzo con directivos de las principales empresas afincadas en España, que se celebró en la ciudad condal y a la que también asistió Artur Mas.
En total, se trata de 5.000 millones de euros comprometidos "en poco más de un año", incidió Mariano Rajoy, que aseguró que convierte a la nación en "punta de lanza en su firme puesta europea". En los últimos meses se ha conocido que Ford trasladará a Valencia la factoría que hasta la fecha tenía en Bélgica, que Fiat aportará 500 millones de euros extra en sus plantas de Madrid o Barcelona o que Renault amplió su plantilla en 1.300 nuevas personas en sus plantas de Sevilla, Valladolid y Palencia.
Los grandes fabricantes, cuyos responsables españoles estaban en la cita, han encontrado en España "el entorno más competitivo, accesible y fiable para consolidarse", en palabras del presidente, que explicó que "un 12 por ciento de nuestra población activa trabaja en este sector entre empleos directos e indirectos y en su mayoría son puestos de trabajo de alta cualificación".
Para mantener este tirón, Rajoy recordó las medidas aprobadas por el Ejecutivo como los planes PIVE o el apoyo al vehículo eléctrico. También cito la reforma laboral, muy aplaudida por el sector.