La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha advertido este lunes de que queda todavía un camino "largo y difícil" para que la economía española pueda crear empleo.
Durante su intervención en la Comisión de Empleo y Seguridad Social del Senado para informar de la evolución del desempleo en España, Báñez ha pedido la "responsabilidad" de todos los partidos políticos y de los agentes sociales para superar la realidad económica y social que "sigue siendo muy dura".
"No cabe la parálisis, la complacencia, ni la relajación", ha dicho, tras insistir en que "no se puede crear empleo con seis trimestres sucesivos de recesión".
Además, ha señalado que la reforma laboral aprobada por el Gobierno tampoco puede "crear empleo por sí misma" sino que ha servido para que a corto plazo se frene el ritmo de destrucción de empleo.
Ha insistido que el camino que queda por recorrer hay que hacerlo con "esfuerzo y dedicación" y ha calificado los datos del paro que llegan a los 6,2 millones de desempleados como la situación "más dramática" por la que atraviesa España, sobre todo cuando el desempleo juvenil llega al 57%.
Además, en los tres primeros meses se destruyeron 322.300 puestos de trabajo hasta situar el número de ocupados en 16.634.700 y la tasa de actividad en el 59,68%, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Báñez ha reflexionado por primera vez en público sobre los datos de la EPA después de que fueran difundidos el pasado 25 de abril por el INE.
La ministra ha lamentado que la elevada tasa de paro juvenil sea el aspecto "más duro" de esta cifra y ha reiterado que el primer objetivo del Gobierno y el más esencial es "darle la vuelta a esta difícil situación".
No obstante ha señalado que el ritmo de destrucción de empleo se ha frenado en el primer trimestre del año y ha indicado que la "masiva" destrucción de empleo público que se ha registrado es consecuencia de los ajustes acometidos en el proceso de consolidación fiscal.
Báñez ha dicho que pese a que existen indicadores económicos de mejora y las relaciones exteriores "van mucho mejor", no es suficiente.
"El clima de la realidad económica y social sigue siendo muy duro y en ciertos casos dramáticos", ha indicado, al tiempo que ha recordado que las destrucción de empleo entre 2007 y 2011 fue "masiva" y se perdieron 2,7 millones de empleos.
La ministra se ha mostrado optimista sobre la senda reformista del Ejecutivo que -ha dicho- no cesará ya que "hace una año había dudas sobre la continuidad de España en el euro y hoy hemos demostrado que podemos cambiar el ritmo de la economía española".
Báñez ha valorado además la labor de los agentes sociales, sindicatos y empresarios, al firmar un acuerdo de moderación en los salarios, aunque ha insistido en que deben sentarse "con la misma buena fe" para abordar con "la misma responsabilidad" la renovación de los convenios colectivos que decaen a partir del 8 de julio.
Entre las medidas que ha recordado que está llevando a cabo el ministerio de Empleo ha destacado la ordenación y simplificación de los modelos de contratos existentes para facilitar las contrataciones. Ha señalado que se trata de una "clarificación administrativa" de las diferentes modalidades contractuales.