La gestión de Sonia Gumpert al frente del Colegio de Abogados de Madrid sigue produciendo incertidumbre y desasosiego en buena parte de la abogacía madrileña.
Los tres meses que lleva al frente del Colegio de Abogados de Madrid arrojan un saldo preocupante. Tres cargos electos han dimitido y, según fuentes cercanas al ICAM, otros tres se plantean la dimisión –lo que, de suceder, obligaría a la convocatoria de nuevas elecciones-.
Además, los principales soportes con los que contó Sonia Gumpert durante el periodo previo a las elecciones, la Plataforma en Defensa de la Abogacía Madrileña, han retirado públicamente su apoyo a la decana.
Tanto las dimisiones como la retirada de apoyos tienen que ver con el incumplimiento de promesas electorales –relacionadas con medidas inmediatas que comprometió para los primeros meses de gestión-. Algunas de estas medidas eran la anulación de la creación de una mutua en sustitución del antiguo seguro médico, la anulación de la delegación del voto a tres, o la de rebajar de forma inmediata la cuota de colegiación a los abogados no ejercientes. En tres meses, Sonia Gumpert no ha tomado ni propuesto decisión alguna sobre estas promesas electorales.
Además, pese a hablar de transparencia y austeridad en el Colegio, diferentes sectores de la abogacía han criticado la opacidad en la gestión de esta institución. Por otro lado, las promesas de austeridad han quedado también en papel mojado. Según fuentes cercanas al ICAM, Gumpert ha incrementado la partida de salarios en más de medio millón de euros. Por otro lado, pese a que el año pasado el anterior decano logró un superávit de más de 6.000 euros por captación de donaciones en la partida de responsabilidad social, Gumpert ha presupuestado un gasto de 250.000 euros para el presente ejercicio.
(Extracto del proyecto de presupuestos del ICAM 2013 | Fuente: ICAM)
(Extracto del proyecto de presupuestos del ICAM 2013 | Fuente: ICAM)
Esto, unido a supuestas irregularidades y opacidad en la gestión del colegio de abogados ha sido la gota que ha colmado el vaso del principal apoyo con el que contaba Sonia Gumpert en su llegada al decanato del Colegio de Abogados de Madrid, APRA y la Plataforma en Defensa de la Abogacía Madrileña.