El Ministerio de Hacienda plantea ampliar el objetivo de déficit de Cataluña hasta el 1,8% e incluso el 2% para 2013 frente al 0,7% previsto inicialmente, según fuentes participantes en la negociación consultadas por La Vanguardia. De hecho, en principio, también se podrán beneficiar de un margen similar el resto de las comunidades del arco mediterráneo (Valencia, Baleares y Murcia).
Un déficit del 2% obligaría a la Generalidad a recortar al menos 1.800 millones este ejercicio, pero suavizaría en gran medida el volumen de ajustes presupuestarios que tendría que acometer Cataluña en caso de mantenerse el objetivo del déficit en el 0,7% del PIB.
El Gobierno estudia la posibilidad de flexibilizar el objetivo de déficit de todas las CCAA en caso de que, finalmente, la UE eleve desde el 4,5% al 6% el límite máximo de descuadre presupuestario fijado para España. Esto permitiría, según estas mismas fuentes, elevar el objetivo de déficit autonómico desde el 0,7% al 1,5% de media. Sin embargo, Hacienda también plantea la posibilidad de establecer un déficit diferenciado en función de las distintas autonomías, premiando a algunos de los gobiernos regionales más incumplidores (con mayor déficit), como es el caso de Cataluña y la Comunidad Valenciana.
En concreto, si bien el Gobierno acordará inicialmente un déficit común para todas las autonomías, Hacienda perfilará los objetivos individualizados con comunidades como Cataluña o País Vasco, entre otras, en una negociación bilateral. Este modelo de déficit diferenciado o asimétrico contará con el rechazo frontal de algunas autonomías gobernadas por el PP como Madrid, Galicia, Castilla y León, Extremadura o Aragón. Las fuentes de la negociación son muy conscientes de que la asimetría en la senda de cumplimiento del déficit desembocaría en el choque entre unas y otras. Así que aseguran que la decisión final, a la vista de la oposición interna que generará, deberá ser impuesta por el Gobierno.
De momento, lo que tanto el Ejecutivo de Mariano Rajoy como el PP, por boca de su secretaria general, María Dolores de Cospedal, han pedido a todas sus autonomías es "comprensión" ante la decisión final que adopte el Ministerio de Hacienda. Es decir, que no se abra una batalla territorial en el Partido Popular. El Gobierno está completamente decidido a "no dejar caer" a ninguna comunidad y considera que la flexibilización del déficit puede servir de moneda de cambio para las comunidades más ahogadas por el déficit ante el más que previsible retraso de la actualización del sistema de financiación autonómica, que aún no se ha comenzado a negociar y que debería estar vigente el 1 de enero del 2014.