La deuda de las entidades locales en 2012 ascendió a 41.964,2 millones de euros, 6.545 millones más que en 2011, lo que supone un incremento del 18,4 por ciento, según los datos facilitados este miércoles por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. De esa cantidad, 35.290 millones se corresponde con lo que deben los ayuntamientos; 6.467,5 las diputaciones, consejos y cabildos insulares y 206,6 las entidades locales menores y mancomunidades.
El ayuntamiento más endeudado es el de Madrid, con 7.429,6 millones de euros, mientras que la deuda de Barcelona era de 1.780 y Valencia debía 975,7 millones, a 31 de diciembre de 2012. Los datos del Ministerio precisan que los ayuntamientos madrileños suman la deuda mayor, con 9.414,6 millones, de los que más de 7.400 corresponden a Madrid.
Las corporaciones andaluzas aglutinan unas pérdidas de 6.832,4 millones, concretamente las de Cádiz absorben 1.615,4 millones, en tanto que las de Málaga deben 1.493,2. Los ayuntamientos catalanes deben 5.512,2 millones, de los que 3.616,4 son de los de Barcelona y 1.780 de la Ciudad Condal. Los de la Comunidad Valenciana tienen un déficit de 3.671,9 millones, un tercio en la provincia valenciana y 975 en la capital del Turia.
Los municipios de Castilla y León adeudaban 1.354,9 millones, mientras que las corporaciones aragonesas registraban unas pérdidas de 1.184,8 millones; 1.081,2 las castellanomanchegas y 1.020,3 las canarias. La deuda de los ayuntamientos murcianos ascendía a 968,9 millones; a 845 los baleares; 773,4, los gallegos; 647,5 los vascos; 481,2 los asturianos; 321,8 los extremeños y 304,1 los navarros. Las menores deudas se concentraron en las corporaciones cántabras, 246,3 millones, y riojanas, 118,8 millones, en tanto que Ceuta debía 269,5 y Melilla, 113,5 millones.
Esta mañana, en el pleno del Congreso, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en respuesta a dos preguntas parlamentarias, ha señalado que el Gobierno trabaja con los ayuntamientos que están en peores condiciones financieras, derivadas de su alto endeudamiento, independientemente del color del partido que tengan. Montoro ha asegurado que son "una minoría" los ayuntamientos que tienen problemas financieros dentro del conjunto de las más de 8.100 corporaciones, lo que "da capacidad" al Gobierno para gestionar esa situación, "que tiene que ser individual" y "acorde con las comunidades autónomas".
El ministro se ha referido a la reunión del martes de la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL), donde se reveló que unos 3.500 ayuntamientos, el 40 por ciento del total, tienen superávit presupuestario, que podrán destinar este año a inversiones en sus municipios y no a reducir deuda, como marca la ley.
Ha destacado que el déficit del conjunto de los ayuntamientos ha mejorado sustancialmente respecto al objetivo previsto, al cerrar 2012 con un 0,15 por ciento del PIB, cuando la previsión era del 0,30. También se acordó poner en marcha un nuevo Plan de Pago a Proveedores para 2013, que atenderá a la liquidez de los ayuntamientos "de manera perentoria" y "va a impedir las deudas de las comunidades autónomas con las corporaciones locales".