Este martes, durante la Sesión de Control en el Senado, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha hablado de los objetivos del déficit público en un rifirrafe con el portavoz socialista, Marcelino Iglesias, que ha aprovechado para echarle en cara la corrección de Eurostat, los ajustes y, también, su silencio sobre Bárcenas.
Tras la afirmación del socialista de que Eurostat "le ha sacado los colores", Rajoy ha pedido al principal partido de la oposición que ponga en valor que el déficit se situó finalmente en el 6,98% y ha dicho de la corrección de la UE que fue "un cambio de criterio" contable. "Cuando usted habla de que el crédito de España está en entredicho, no me queda más remedio que decirle que eso pasó cuando nos comprometimos a un déficit del 6% y fue del 9%", ha afirmado en alusión al anterior gobierno.
El socialista se ha quejado de que "dieciséis meses después de todo siga teniendo la culpa Zetapé (sic)" y ha cargado contra los ajustes del Gobierno, pidiendo a Rajoy que sea capaz de decirle a Angela Merkel que "pare la política de recortes en España". "Necesitamos un gobierno que sea capaz de dedicarse al cien por cien a resolver los problemas de nuestro país, pero les ocupa demasiado tiempo ese señor innombrable", ha dicho en alusión a Bárcenas.
La respuesta de Rajoy ha sido para recordarle la crisis interna del PSOE: "Ni siquiera están ustedes en condiciones de hacer que las cosas vayan a peor". Tras lamentar que Iglesias intente "buscarle tres pies al gato", ha sacado pecho por la decisión de Bruselas de relajar el objetivo de déficit de este año y de la posibilidad de que pase lo mismo en 2013. "El Gobierno no lo hizo tan mal", ha dicho.
Rajoy ha asegurado que "no podemos vivir con un déficit como el que tenemos", pero también ha pedido "una senda razonable y sensata" de reducción de los números rojos, lo que debería ir acompañado de "reformas estructurales". En este sentido, ha afirmado que "ésa es mi opinión y creo que es la suya", es decir, que PSOE y PP coinciden en que sería bueno que Bruselas permitiese a España más margen para cumplir con los objetivos de déficit. "Demos la batalla en Europa y apoyen al Gobierno al menos en defensa de los intereses de España", ha concluido el presidente.