Los bancos de Chipre volvieron a abrir este jueves a mediodía (11.00, hora española) después de permanecer diez cerrados con el objetivo de evitar una fuga de depósitos tras el acuerdo alcanzado con la troika -la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI)- para un rescate de 10.000 millones de euros.
Las primeras informaciones que llegan de la isla mediterránea aseguran que no se produjeron grandes avalanchas ni tensiones en el momento de la apertura. En algunas sucursales se estableció un orden de entrada para facilitar el funcionamiento en el interior de las oficinas y se repartieron hojas informativas con las medidas de controles de capital a los clientes que estaban esperando.
Según informó una portavoz del Banco Central de Chipre, los bancos permanecerán abiertos durante seis horas, ya que cerrarán sus puertas a las 18.00 (17.00 hora española). Eso sí, los chipriotas sólo podrán cobrar cheques o retirar dinero en los bancos del país por un importe máximo de 300 euros diarios, según establecen los controles de capital que se pondrán en marcha cuando los bancos de la isla vuelvan a abrir este jueves.
La liquidez de todos los bancos estará garantizada, pues a última hora de la tarde del miércoles el Banco Central Europeo envió cuatro contenedores con 5.000 millones de euros en efectivo.
Los límites
Pese a todo, serán muchas las preguntas que deberán responder los empleados a lo largo del día, como, por ejemplo, la de María, una mujer que se planteaba cómo hacer frente al pago de su alquiler de 1.300 euros si solo puede sacar 300 euros al día.
Ante las puertas de una sucursal del Banco Popular (Laiki), sometido a un proceso de liquidación, el ambiente era ordenado, con una mezcla de ánimo entre el enfado y la resignación. Melpo, una empleada que acudió a depositar los cheques de su empresa, señalaba que no tenía otra alternativa que ingresarlos en ese banco, pues las medidas de restricción prohíben la apertura de nuevas cuentas. En el caso del Popular, todos los depósitos inferiores a 100.000 euros pasarán automáticamente al Banco de Chipre, la primera entidad del país, mientras que el resto irá a un banco "malo".
Los empleados de todos los bancos habían regresado ya a primera hora de la mañana a sus puestos de trabajo, y hasta el momento de la apertura han estado instruyéndose sobre las restricciones que se han impuesto para un periodo inicial de una semana.
Las medidas adoptadas:
- Límite de retirada diaria de 300 euros en los bancos para las personas físicas y de 5.000 euros para las empresas, a las que se permite esta cantidad para facilitar el pago de salarios.
- No se podrán cobrar cheques, aunque sí ingresarlos en cuenta.
- El pago con tarjeta de crédito no está sujeto a limitaciones en el interior del país, aunque sí en el extranjero, con un tope de 5.000 euros mensuales.
- Queda prohibido sacar más de 3.000 euros del país, sea mediante transferencia bancaria o físicamente, aunque se permitirán ciertas excepciones, como el pago a funcionarios chipriotas expatriados y a estudiantes chipriotas en el extranjero (con un límite de 5.000 euros trimestrales y siempre y cuando lo envíen familiares directos).
- No habrá restricciones al pago de facturas por importaciones, siempre y cuando se presente la debida documentación.