Félix Moreno estudió Derecho y Ciencias Empresariales en ICADE. Es trader y analista de divisas, acciones y materias primas. Compró su primer Bitcoin en noviembre de 2010 y ahora se sienta con Libre Mercado para hablar sobre la crisis económica, la inestabilidad monetaria y la alternativa que supone el Bitcoin.
Pregunta: ¿Los bancos centrales nos sacarán de esta crisis o, por el contrario, nos han metido en ella?
Respuesta: Los bancos centrales, y todo nuestro sistema financiero basado en el dinero fiat, han originado esta crisis y todas las de los últimos 100-200 años. Desde que se abandonó el último resquicio del patrón oro en la primera mitad de los años 70, hemos visto burbujas cada vez más grandes y crisis cada vez más profundas.
Más que una reacción a esta crisis, lo de los bancos centrales está siendo una sobre-reacción. Esa sobre-reacción está generando inflación y más expansión crediticia, que para mí son sinónimos. Y de este modo vivimos un ciclo recurrente: burbuja, pinchazo, inflación para salir de la crisis, nueva burbuja, nuevo pinchazo, más inflación para salir de la crisis... Las raíces de esa dinámica son el dinero fiat, la reserva fraccionaria y el monopolio central del dinero.
¿En qué puede acabar esto?
Esta estafa puede acabar de dos maneras. Opción 1, que paren... lo que nos lleva a una recesión deflacionaria. Opción 2, que sigan... lo que nos lleva a una crisis de hiperinflación.
¿Y no debería semejante panorama invitarnos a desnacionalizar el dinero?
Temo que la mayoría de la gente se ha acostumbrado a esta situación y no se planteará algo diferente salvo que lleguemos a una situación límite. Creo que nadie puede detener la crisis que se avecina, pero sí podemos empezar a sentar las bases de un paradigma más sostenible.
En cualquier caso, me sorprende que la gente no se pregunte cómo funciona eso que llevas en el bolsillo y que se usa para comprar el pan todos los días. Cualquiera pasa meses viendo hasta el detalle cada prestación de su próximo coche, y eso es importante hacerlo, pero más importante aún es conocer el dinero y su funcionamiento. Es triste que esta reflexión no sea generalizada, pero por eso debemos asumir que las propuestas encaminadas a mejorar el escenario actual tienen que partir necesariamente de minorías.
¿Por ejemplo el Bitcoin?
Siempre se hablará de volver al patrón oro o de mejorar el sistema monetario actual, pero esas propuestas son de difícil aplicación para el corto o medio plazo. Frente a eso, seguir desarrollando el dinero electrónico es una alternativa que ya está en funcionamiento hoy mismo.
El Bitcoin es una moneda voluntaria, alternativa, que solamente triunfa porque se acepta su superioridad frente a anteriores iniciativas y frente al dinero de los bancos centrales. Ojalá quienes estén leyendo esta entrevista se hagan preguntas sobre el dinero y se interesen por el Bitcoin.
¿Qué rasgos tiene dicha divisa?
En esencia, es una moneda descentralizada, basada en el intercambio P2P. El número total de unidades tiene un tope máximo que será alcanzado a lo largo del tiempo. No hay en el Bitcoin ningún control central ni monopolio capaz de alterar la oferta de modo inesperado y discrecional. Hablamos por tanto de un proceso de creación del dinero mucho más transparente y público.
A través de los llamados "mineros digitales", Bitcoin asegura el registro de las transacciones, la total confidencialidad de los intercambios y la seguridad del sistema. Estos procesos comenzaron a desarrollarse hace cuatro años y ahora ya están haciendo mucho ruido, llegando ya a cientos de miles de personas. La visibilidad va a más, y si antes la pregunta era qué se podía comprar con Bitcoin, pronto será qué no se puede comprar con Bitcoin.
¿Confía por tanto en que el Bitcoin se vaya expandiendo?
En países como Estados Unidos y ciudades como Berlín hay menos adopción que en España, donde aún vamos por detrás, pero todo llega. Lo bueno es que, por mucho que los fundamentos de la moneda son cruciales, la gente apostará en última instancia por el Bitcoin cuando demuestre su fortaleza en el campo de la usabilidad.
Y ahí está la clave, en la usabilidad, porque el Bitcoin es al dinero lo mismo que el e-mail a la correspondencia. Poca gente reflexiona sobre el funcionamiento del correo electrónico, simplemente lo usan porque reconocen que es una tecnología útil, sencilla. Por esa misma razón, el Bitcoin va a más.
¿Qué aclaraciones haría para los escépticos de una moneda digital?
Es importante saber que es seguro, que no hay intermediarios, que garantiza la propiedad total, que se desarrolla en un marco monetario estable, que no puede ser falsificado, que es rápido y que no entiende de límites nacionales.
Hay muchos sectores que podrían beneficiarse. Con la música, por ejemplo, es necesario mediar con iTunes o con PayPal para poner a la venta nuestro producto, ¿verdad? Pues con Bitcoin ya no hace falta ese intermediario, lo que abarata los precios para el consumidor y aumenta el control del productor. Son estos escenarios sectoriales lo que explican mejor el atractivo que tiene el Bitcoin, más allá de las bases técnicas y teóricas de la moneda.
Póngame otro ejemplo entonces...
Pues pensemos por ejemplo en la enorme cantidad de gente que ha emigrado al extranjero para ganarse la vida y poder enviar remesas a su familia y a su país de origen. Hoy en día, esas remesas tienen el inconveniente de las tasas y costes derivados de la intermediación. Si hablamos de gente humilde, estas tasas y costes tienen un impacto aún más dañino. Con el Bitcoin esos inconvenientes se verían reducidos drásticamente, si no eliminados.
El dinero tiene tres grandes funciones: medio de pago, reserva de valor y unidad de cuenta. El Bitcoin cumple y cumplirá las tres de maravilla, pero, como he dicho, su atractivo también viene de que a partir del Bitcoin se pueden crear muchas cosas.
El Bitcoin está cotizando alto en los últimos meses...
Uno puede especular con la moneda, y puede ganar dinero con ello, pero sin duda es más interesante llegar al Bitcoin por lo que significa en sí y por las oportunidades que abre. En cualquier caso, es obvio que si la moneda va a ir a más, existe el potencial de ganar dinero con ella. Hace tres años, cada unidad cotizaba a unos pocos centavos de dólar. En febrero llegó a los 30 dólares y en marzo ha superado los 50 dólares. Esta no es una recomendación de inversión, claro está, pero es evidente que si entendemos la fortaleza de esta moneda, entendemos también su potencial.
¿Y hay manera de frenar este auge?
He visto alrededor de 15 monedas electrónicas que han fracasado, unas por injerencia de los gobiernos, otras por falta de aceptación en el mercado... Una de las características fuertes de Bitcoin es que su red descentralizada es más robusta, pues no tiene un punto de ataque. Esto implica que solamente apagando internet se podría frenar su uso, e incluso esto es discutible y matizable.
A nivel regulatorio, los gobiernos podrán decir misa, pero igual que el tabaco no se pudo prohibir en un campo de concentración, tampoco se podrá prohibir el intercambio de dinero electrónico en Internet. Como bien sabes, en Zimbabue prohibieron el oro, ¡pero la gente seguía usando pepitas para pagar el pan!