Durante años hemos oído hablar de la mala gestión en Telemadrid y muchas quejas, algunas probablemente con no poco fundamento, sobre el gran número de directivos en la cadena madrileña y los elevados sueldos de algunos. Esta ha sido, de hecho, buena parte del argumentario de los que pretenden salvar una televisión impidiendo que emita.
Por el contrario, en contadísimas ocasiones se han podido escuchar críticas a otros aspectos de la cadena, como el deficiente sistema organizativo o los privilegios, muy por encima de lo habitual en el mercado, de los que disfrutaban los trabajadores y los representantes sindicales de una empresa que nunca ha producido beneficios.
Para conocerlos un poco más nos hemos acercado al Convenio Colectivo de la televisión, un documento de notable complejidad con más de cien páginas, diez anexos, once niveles salariales y 51 categorías profesionales. Categorías que son, además, compartimentos tremendamente estancos: cuando se pertenece a una de ellas no se puede, si no es con un procedimiento complejo, realizar tareas asignadas a otra.
Pocas horas, muchas libranzas
Lo primero que llama la atención es la carga de trabajo, realmente ligera, que se supone deben soportar los trabajadores: el común tendrá horarios de 35 horas a la semana (reconocidas en convenio, que posteriormente se han ampliado a 37,5) a las que, en caso de hacerse sin interrupción, se tendrá que restar 20 minutos de descanso. Si la labor del trabajador se desarrolla en horario nocturno éste tendrá sólo 30 horas.
Además, las libranzas pagadas son sorprendentemente laxas: por ejemplo, los 15 días por matrimonio se extienden también a aquellos que simplemente se registren como pareja de hecho.
En el caso de problemas u otros asuntos en el entorno familiar las condiciones son también espectaculares: hasta cuatro días de libranza puede tener un trabajador de Telemadrid si se opera a un suegro, un yerno, una nuera o un cuñado. Del mismo modo, si se casa su padre, su hijo, un hermano político o un nieto tendrá también un día libre.
Vacaciones a gogó
Lo más llamativo, sin embargo, es el excepcional periodo de vacaciones del que pueden disfrutar los trabajadores de Telemadrid, pues aunque en principio sólo tienen los habituales 22 días laborables a éstos se les añaden seis días por "asuntos propios" que, al contrario de lo que ocurre incluso en ámbitos de la Administración Pública, se pueden acumular al periodo vacacional.
Del mismo modo, se pueden acumular a los días de libranza que se consigan al, por ejemplo, trabajar en días festivos para garantizar la continuidad del servicio. Una libranza que también son especialmente generosas en la televisión pública madrileña: el trabajador puede escoger entre librar un día y recibir, además, una compensación económica o librar dos días.
Así, un trabajador de Telemadrid podría llegar a acumular sin problemas unas vacaciones de 34 días laborables, lo que le permitiría, por ejemplo, dejar su trabajo el próximo día 28 y no volver hasta el 19 de febrero.
Complementos salariales
Otro aspecto llamativo de las condiciones contractuales de los trabajadores del ente público televisivo madrileño son los complementos salariales con los que redondean sus sueldos.
Así, hay por ejemplo complementos de antigüedad en virtud de los cuales se cobran más de 50 euros al mes por cada trienio acumulado. Teniendo en cuenta que buena parte de la plantilla lleva muchos años en plantilla las retribuciones son considerables.
En el caso extremo, un trabajador que lleve en la cadena desde su inauguración en 1989 llevaría ya siete trienios acumulados, es decir sólo en concepto de antigüedad cobraría no menos de 360 euros al mes, más de 4.300 al año.
Además de este, hay toda una colección de complementos salariales extra: por participar en un programa, por "disponibilidad", por "alteración horaria", por trabajar en sábados y domingos, por "dedicación especial"... así hasta nueve diferentes conceptos.
No sólo eso, el convenio prevé una serie de generosas ayudas, desde la existencia de un comedor de empresa para los trabajadores hasta becas de estudio, pasando por subvenciones para las guarderías, seguros de vida, etcétera. Obviamente, la existencia de todas estas ayudas no sería negativa en sí misma, pero sí resulta contraproducente en una compañía que no ha generado beneficios en toda su historia.
Beneficios para los sindicatos
Si las condiciones laborales para los trabajadores en Telemadrid son llamativas, las ventajas que se prevén para los sindicatos en la compañía todavía lo son más. Para empezar, las centrales que cuenten con un mínimo de un 10% de representación en el ente contarán con hasta siete liberados: tres como sección sindical y cuatro más como central sindical.
Además de eso, los miembros del comité de empresa pueden obtener hasta 50 horas de libranza al mes para su tarea sindical (aproximadamente un tercio de su horario total) y estas horas pueden acumularse en uno o varios miembros del comité, que así también quedarían liberados.
Por supuesto, se les cede un local para la realización de sus actividades y también otros servicios como teléfono, fotocopiadora, reprografía, multicopista...
Finalmente, un aspecto llamativo es que el convenio colectivo permite a los sindicalistas de Telemadrid celebrar hasta 20 asambleas al año en horario laboral, además de no considerar en horario laboral las que se convoque media hora antes del fin del horario estándar.