Aunque la extrema situación financiera y soberana de Chipre -miembro de la zona euro- está pasando casi desapercibida entre la vorágine informativa derivada de la crisis del euro, su caso es muy especial, ya que está a punto de protagonizar el mayor rescate bancario de toda Europa y el segundo más importante de la historia reciente tras el de Indonesia a finales de los años 90.
Y es que, si bien la cuantía en términos absolutos pudiera parecer pequeña, próxima a los 10.000 millones de euros, equivale ni más ni menos que al 56% del PIB chipriota, justo por detrás del rescate financiero de Indonesia tras la crisis asiática de 1997 (57%) y por delante de la banca argentina tras la crisis de 1980 (55% de su PIB). De hecho, es muy superior al reciente rescate de la banca irlandesa, cuyo importe asciende al 41% de su PIB, tal y como muestra el siguiente gráfico.
Fuente: The Atlantic
La troika, formada por la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), prevé inyectar 10.000 millones de euros para recapitalizar la banca de Chipre, según un borrador del acuerdo con Nicosia revelado esta semana por Financial Times. El documento señala que es necesario "reestructurar a fondo y reducir las instituciones financieras, reforzar la supervisión, solventar el déficit de capital previsto y mejorar la gestión de la liquidez".
Dado que la inyección de 10.000 millones equivale al 56% del PIB de Chipre, la troika recomienda un drástico plan de reformas y austeridad presupuestaria para "restaurar la sostenibilidad de la deuda", en donde se incluiría la posibilidad de privatizar compañías públicas y semipúblicas", añade el documento.
El presidente de Chipre, Dimitris Christofias, anunció el pasado martes que intentó evitar el rescate "buscando otras fuentes de financiación", "pero no ha sido posible obtener la financiación necesaria", agregó. Chipre obtuvo en 2011 un préstamo por Rusia de 2.500 millones de euros y solicitó este año a Moscú otro de 5.000 millones sin obtener una respuesta positiva. El Ejecutivo del comunista Christofias solicitó el pasado junio ayuda a sus socios de la zona euro por la debilidad de su sector bancario, muy expuesto a la crisis de Grecia, y ante la imposibilidad del país de financiarse en los mercados. Christofias culpó a los banqueros de su país por haber expuesto a sus entidades a la crisis económica griega.
"Cerca 4.000 millones de euros son la perdida de los bancos chipriotas por su exposición a los bonos griegos" dijo Christofias, que destacó que la recapitalización del sector supondrán "hasta 10.000 millones de euros". Nicosia ha logrado un acuerdo preliminar con la troika, aunque sigue negociando la condicionalidad de las ayudas.
Un rescate de tal tamaño podría acabar lastrando de forma sustancial la economía chipriota, a la vista de experiencias similares. Según muestran los datos del FMI, aunque no existe una correlación perfecta, la tendencia es que, a mayor rescate público de la banca, menor crecimiento potencial del país durante los años siguientes (crisis más larga), y al revés, tal y como reflejan el caso de Indonesia y Argentina.