El Gobierno ya acepta que España podría incumplir el objetivo oficial de déficit público este año. Eso sí, lo hará con el beneplácito de la UE, que ya ha admitido (en cierto sentido dando su visto bueno) que los números rojos del conjunto de las administraciones públicas alcanzarán el 7% a final de 2012. La puerta la abrió el pasado viernes el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn. Y este martes se ha empezado a colar por la misma Cristóbal Montoro.
El objetivo del Gobierno "sigue siendo el 6,3%" ha asegurado el ministro de Hacienda, que posteriormente ha indicado que no hay que sacralizar ese límite que, debido a la caída en los ingresos y al endurecimiento de la recesión, podría no alcanzarse: "No estamos satisfechos cerrando el año al 7%. Pero no es cuestión del guarismo mágico del 6,3%, sino de la importancia que esto [el ajuste presupuestario] tiene en una recesión económica".
El problema es que en esta cuestión del objetivo de déficit llueve sobre mojado. España incumplió con el compromiso que tenía con la UE en 2011. De hecho, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero prometió el 6% casi hasta el último minuto y luego se ha descubierto que la cifra real alcanzó el 8,94% (el 9,4% si se tienen en cuenta las ayudas a la banca).
Por eso, Mariano Rajoy se fijó como principal objetivo nada más llegar a La Moncloa alcanzar el objetivo de déficit pactado con las instituciones comunitarias. En enero, la cifra era del 4,5%. Luego, pasó al 5,3% y posteriormente al 6,3%. En cada ocasión, el Gobierno ha asegurado que el compromiso es máximo. Y luego ha intentado que la UE abriese un poco más la mano. Es cierto que la situación es diferente a la del año pasado, puesto que en aquel momento el incumplimiento fue unilateral, sin permiso de Bruselas y con engaños.
Pero no es menos cierto que, aunque de cara a Europa la credibilidad del Gobierno sí ha mejorado, la cifra final de déficit de España seguirá muy por encima del objetivo establecido al principio del año. Si se cumple lo vaticinado por Rehn (Montoro ha admitido implícitamente que es posible), las administraciones públicas españolas cerrarán 2012 con un 7% en términos del déficit que tiene en cuenta Bruselas y del 8% si se tienen en cuenta las ayudas a la banca. No es una cifra tan diferente a la del año pasado y habrá que ver cómo lo valoran los inversores internacionales.
Las autonomías
Montoro ha hecho estas declaraciones en la presentación de los datos de ejecución presupuestaria de las comunidades autónomas hasta septiembre, en el que se ha dado a conocer que las regiones están más cerca de cumplir con el objetivo de déficit que tienen impuesto para este año: el 1,5% del PIB. De hecho, según ha asegurado Cristóbal Montoro, el 0,93% que registraron en términos de Contabilidad Nacional a finales de septiembre es la mejor prueba de que los gobiernos regionales, por fin, están en el buen camino.
"Esto no es garantía de un cumplimiento completo", aseguró el ministro de Hacienda, pero sí es una prueba de que "fijarse objetivos ambiciosos de déficit público es necesario y se puede cumplir". Por eso, ha insistido en que el 0,93% no es "la puerta para relajarse" sino un indicio de que pueden alcanzarse los objetivos buscados.
Según las cuentas del Ministerio de Hacienda, las comunidades autónomas registraron un déficit de 9.790 millones, el 0,93% del PIB, hasta el mes de septiembre en términos de contabilidad nacional. Sin embargo, en términos homogéneos, la cifra sube hasta el 1,14% del PIB y a los 11.978 millones.
Este año todo lo que tiene que ver con la ejecución presupuestaria de las administraciones públicas está más embrollado que de costumbre. El Gobierno central adelantó a los ejecutivos autonómicos determinadas cantidades a principios de año que luego estos deben ir devolviendo. Por eso, es complicado hacer una estimación de cómo van las cosas. Incluso, el déficit del Estado central ha caído en los últimos meses en términos de contabilidad nacional, según se iban produciendo esos ajustes. En cualquier caso, hay que destacar que tanto el 0,93% como el 1,14% están muy alejados del 2,2% que presentaban las 17 comunidades en septiembre de 2011.
En términos de Contabilidad Nacional, todas las comunidades autónomas han registrado déficit hasta septiembre salvo el País Vasco (+0,25%) y Asturias (+0,63%). Los déficit más destacados se registraron en Murcia (-2,23%) y Navarra (-2,04%), aunque en este último caso Montoro hizo la salvedad de que se debía a "razones de calendario". Entre los gobiernos autonómicos más beligerantes en contra del objetivo de déficit, Andalucía registraba un 1,63% y Cataluña un 1,56%, en ambos casos por encima del objetivo para todo el año y muy por encima de la media regional registrada en septiembre.
Cartas para todos
Además de valorar positivamente el ritmo de cumplimiento de los objetivos de déficit por parte de las regiones, Montoro ha hecho un repaso de todos los temas relacionados con las cuentas públicas:
- Cartas para todos: "Vamos a pedir a las CCAA a que cumplan las medidas de los planes económicos-financieros. Enviaré una carta a cada una de las autonomías, para insistirles en la obligación de cumplir con el programa del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Esta otra clase de presión está siendo efectiva. Quien se desvíe sabe que se le aplicará la ley de estabilidad. Los requerimientos [las cartas] son el primer paso de la ley de estabilidad presupuestaria"
- ¿Comunidades en riesgo?: "Quien está más alto tiene más riesgo, pero alguno de los que aparecen cómodos [en los datos de septiembre] también tienen riesgos. La evaluación desde el ministerio no es coincidente con esos datos. Nuestro empeño y nuestra responsabilidad es empujar a los que están más lejos, para que se acerquen".
- Transparencia: "Éste es un ejercicio nuevo en España. Nunca se había hecho. Pronto estaremos en condiciones de facilitar esta información mes a mes. El conocimiento estará pronto completada con el seguimiento de las comunidades autónomas mes a mes. Nos gustaría que otros fueran tan transparentes."
- ¿Cuál es el objetivo de déficit?: "El objetivo formal sigue siendo el que es, el 6,3%. Pero el propio comisario Olli Rehn, cuando valoró las medidas del Gobierno, valoró que el déficit estaría en torno al 7%. Pero insisto en que lo importante es reducir el déficit público, cuanto más rápido mejor, sin ahondar la recesión española. No estamos satisfechos cerrando el año al 7%. Pero no es cuestión de sacralizar el guarismo mágico del 6,3%, sino de la importancia que esto tiene en una recesión económica".
- ¿Más ajustes?: "Por parte del gobierno no vamos a tomar más medidas. Cuando se aplicará la ley de carácter presupuestaria. Cuando podamos hacer balance. No vamos a aplicar la ley con carácter preventivo".