Los activos que las entidades financieras transferirán al banco malo, que se denominará Sareb (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria), tendrán un valor final neto de entre 60.000 y 70.000 millones de euros, equivalente a un valor bruto de unos 130.000 a 150.000 millones, lo que implica un descuento superior al 50%, según ha anunciado este jueves el director general del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Antonio Carrascosa.
En un debate del Iese en el salón Barcelona Meeting Point sobre oportunidades de negocio del banco malo, ha explicado que ya ha habido hasta cuatro recortes de la valoración de los activos que se adjudicará la Sareb -con datos iniciales de la valoración a 31 de diciembre de 2011-, al que se aplicará un nuevo recorte para fijar el precio de transferencia final, que no ha concretado pero que será "conservador" y con el objetivo de que el producto sea rentable para los operadores privados y públicos.
Carrascosa ha insistido en que la Sareb "no puede tener pérdidas" y este escenario no se contempla, porque su estructura estará diseñada para obtener rentabilidad, aunque el problema no se podrá solucionar de la noche a la mañana, dado que es un vehículo que nace para eliminar activos ahora improductivos de los balances bancarios.
El director general del FROB ha argumentado que la clave está en el precio de transferencia de los activos, prevista para diciembre, que debe tener en cuenta la bajada de precios general del mercado inmobiliario en España hasta ahora y la que todavía puede darse, para evitar que más adelante la Sareb deba aplicar una depreciación del valor de sus inmuebles. Asimismo, ha reconocido que la Sareb será un operador "significativo, relevante en el mercado inmobiliario en los próximos años", pero no un actor que por sí mismo recupere la situación del mercado inmobiliario o la perjudique.
Carrascosa también ha apuntado a un calendario de "desinversiones realistas" desde el año uno y dos hasta el plazo máximo de 15 años, aunque espera que la liquidación llegue mucho antes porque será una muestra de reactivación del mercado. Además, ha hablado de "liquidación ordenada y razonable", teniendo en cuenta las características de cada tipo de activos, y no una oferta masiva que va a inundar el mercado como temen algunos actores del sector inmobiliario.
Sobre el precio bajo, lo ha visto como una referencia para la venta, y ha recordado que en general se está dando un ajuste estructural en el mercado inmobiliario: "No va a haber subida de precios inmobiliarios dentro de un año, ni de dos ni de tres; son ajustes que se van a quedar durante un tiempo en la economía española". Respecto a si la Sareb será también promotor inmobiliario destacado, ha señalado que "se podrá desarrollar un suelo si se considera la mejor forma para liquidar un activo", pero su objetivo es liquidar los activos, no convertirse en promotor.
Financiación
Preguntado por cómo se financiarán las ventas dado que la Sareb no será un banco, el responsable del FROB ha confirmado que no financiará directamente a los compradores de los activos, y está "trabajando en la firma de protocolos" con las entidades financieras españolas, tengan o no activos en la Sareb.
Además, ha matizado que tampoco se está pensando en una venta retail, sino para inversores institucionales interesados en grupos de activos, por lo que el perfil no es el de compradores que necesiten firmar una hipoteca, aunque pueden darse casos de ventas individuales, pero no será lo habitual.
Sobre las participaciones de control en sociedades inmobiliarias que las entidades financieras deberán transferir a la Sareb, todavía se están valorando los riesgos, lo que incluye realizar una due diligence previa "que podría hasta variar el alcance de lo que se tendría que transferir".