Fitch sitúa el rating de Cataluña (BBB-) en perspectiva negativa, lo que significa que en los próximos meses se podría producir una rebaja de su nota.
Esta decisión refleja la incertidumbre que rodea la oportuna disponibilidad de financiación a través del Fondo de Liquidez Autonómico. Cataluña ha pidió oficialmente y "sin condiciones políticas" al fondo 5.023 millones de euros para cubrir los inminentes vencimientos que su elevada deuda le hace imposible afrontar y que ascienden a 5.755 millones.
Al respecto, Fitch piensa que hasta que el fondo se formalice, las posiciones de liquidez de las regiones estarán bajo presión.