El déficit acumulado de la balanza por cuenta corriente en los seis primeros meses del año se redujo un 30,2%, hasta los 17.134,5 millones de euros, según los datos publicados este viernes por el Banco de España.
Esta disminución se debió, fundamentalmente, a la reducción del saldo negativo de la balanza comercial y al aumento del superávit de la balanza de servicios, que fueron sólo parcialmente compensadas por el mayor déficit en las balanzas de transferencias y de rentas.
En concreto, el déficit acumulado de la balanza comercial se situó en 15.579 millones de euros hasta junio, un 25,6% inferior a los 20.942,7 millones en el mismo periodo del año anterior, debido a que las exportaciones crecieron un 3,7%, mientras las importaciones retrocedieron un 0,9%.
A su vez, el saldo del componente no energético pasó a registrar superávit, frente a la ampliación del déficit energético en aproximadamente un 14,5%.
El superávit acumulado de la balanza de servicios avanzó hasta los 16.377,9 millones de euros, un 19,1% más que en el mismo periodo de 2011. Esta evolución reflejó la ampliación del saldo positivo de la balanza de turismo y viajes, que se situó en 13.063,7 millones de euros (un 0,9% más), y especialmente la mejora del saldo de otros servicios, que registró un superávit de 3.314,2 millones, frente a los 804,5 millones del mismo periodo del año anterior.
La balanza de rentas registró un déficit de 12.055,4 millones de euros hasta junio, superior al del mismo periodo de 2011, que fue de 11.818,5 millones. Por su parte, la balanza de transferencias corrientes mostró un saldo negativo de 5.878,1 millones de euros, un 5,7% superior al de los primeros seis meses del año pasado.
Por su parte, el saldo de la cuenta de capital, que recoge, entre otros conceptos, las transferencias de capital procedentes de la UE, contabilizó un superávit de 2.414,2 millones de euros, frente a los 2.906 millones de un año antes.
Menor necesidad de financiación
El saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, que mide la capacidad o necesidad de financiación generada por las operaciones no financieras de la economía española, fue negativo y se situó en 14.720,3 millones de euros, un 32% menos que en igual periodo de 2011.
En los seis primeros meses del año, las operaciones financieras de los distintos sectores residentes, excluido el Banco de España, medidas por el saldo de su cuenta financiera, originaron salidas netas de capital por valor de 219.817,4 millones de euros, frente a las entradas de 22.457,4 millones del mismo periodo de 2011.
En consecuencia, los activos netos del Banco de España frente al exterior descendieron en 236.790 millones de euros, en contraste con el aumento de 5.167,9 millones del mismo periodo de 2011.
Sólo en el mes de junio se registró un déficit por cuenta corriente de 257,2 millones de euros, muy inferior al registrado en el mismo mes de 2011 (1.322,5 millones), como resultado, fundamentalmente, de la disminución del déficit comercial y del de transferencias corrientes, y al aumento del superávit de servicios, que compensaron el deterioro de la balanza de rentas.