El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Lluís Recoder, ha afirmado que el aumento del 7,5% de los peajes en las autopistas de titularidad estatal es, en su opinión, "totalmente inaceptable" y un agravio comparativo para Cataluña.
Recoder ha valorado como una "falta de sensibilidad o una incompetencia" del Gobierno español el aumento de los peajes de las autopistas estatales, que en Cataluña supondrán la subida de las tarifas de la AP-7 -la conocida como autopista del Mediterráneo-, la AP-2 -la autopista del Nordeste- y la C-33, que conecta Barcelona y Montmeló.
El consejero de Territorio ha asegurado que el aumento no afecta a la mayoría de autopistas españolas y sí lo hace en el 85% de las autopistas catalanas, las que tienen peaje, lo que ha calificado de "totalmente inaceptable".
Según ha dicho, esta medida hará crecer el dinero que pagan los catalanes en autopistas y se irá a Madrid vía impuestos, "sin revertir en nada a cambio para Cataluña". Calcula que el dinero generado por los impuestos de las autopistas catalanas pasará, anualmente, de 311 a 370 millones de euros.
El titular del departamento de Territorio ha reclamado al Gobierno central que los impuestos generados por los peajes de las autopistas en Cataluña "se queden aquí para poder homogeneizar los peajes, bajar precios y romper el agravio comparativo" con el resto de España.
Tras estas quejas, Recoder ha recomendado al Gobierno central, como solución para el mantenimiento de las autopistas, la tendencia impulsada desde la UE que consiste en "aplicar un pequeño peaje a todas las vías de alta capacidad para pagar su mantenimiento".
En cuanto a la situación en Cataluña, Recoder ha asegurado que en las autopistas que dependen de la Generalidad "sólo se subirá el IVA" y bajo ningún concepto se aplicarán incrementos del 7,5%.