El pasado viernes, el Consejo de Ministros no aprobó la reforma del sistema energético que prepara el departamento de José Manuel Soria. Fuentes conocedoras de las negociaciones advierten –y así lo recogían la pasada semana medios como La Gaceta o El Economista– de que uno de los motivos que provocó que esta reforma no viera la luz en el Consejo fue el enfrentamiento que mantienen los titulares de Industria y Hacienda, José Manuel Soria, y Cristóbal Montoro.
Según publicó La Gaceta el pasado viernes, detrás de ese enfrentamiento podrían encontrarse los intereses que el exsocio de Cristóbal Montoro –Ricardo Martínez Rico- tiene en el negocio de la energía termosolar, del que Abengoa es su máximo exponente en España. La reforma contemplaría fuertes recortes en las subvenciones a esta tecnología, lo que entraría en conflicto con los intereses de Abengoa.
Martínez Rico –que fue secretario de Estado de Hacienda cuando Montoro era ministro en la anterior etapa de gobierno del PP–, fue socio de Montoro en la consultora Montoro & Asociados que fundaron en junio de 2006. Dos años después, el 22 de abril de 2008, Cristóbal Montoro vendía su participación y cesaba de sus funciones en la consultora. A partir de aquel momento, pasó a llamarse Equipo Económico SL y Ricardo Martínez Rico se hizo con la presidencia, cargo que comparte con el de consejero de Abengoa.
Precisamente, el discurso corporativo de la compañía que preside Felipe Benjumea está fijado desde hace tiempo en que la política del Gobierno debería pasar por recortar las retribuciones de las tecnologías nuclear e hidráulica, así como del transporte y la distribución, como alternativa a la reducción de las subvenciones a la generación llamada renovable, y sobre todo, la termosolar –centrales eléctricas que emplean cientos de espejos orientados a un mismo punto, donde todos dirigen el reflejo del sol como fuente de calor–.
El consejero delegado de la compañía, Manuel Sánchez Ortega, pedía recientemente esas reducciones de la retribución a las nucleares para ir "a la raíz del problema" del déficit de tarifa. Añadía que "en estos meses el Gobierno ha profundizado seriamente en cuál es la raíz del problema y hoy tiene una percepción del problema y de las fuentes de solución", afirmó Sánchez Ortega en declaraciones a la Cadena SER. En cambio, según algunos expertos en el sector energético, el transporte y la distribución en España, así como el precio del mercado energético se encuentran en la franja más barata de Europa.
El problema, explicaba, "viene de un sistema eléctrico no bien diseñado" y del "desequilibrio entre la retribución de las tecnologías, que hay que corregir de alguna manera". La solución, continuó, "pasa por reducir la retribución de tecnologías como la nuclear y la hidráulica, además de otro tipo de costes como el transporte y la distribución".
El directivo sostuvo que "en modo alguno" el sector de las renovables "escurre su responsabilidad" en el problema del déficit de tarifa, ya que es "parte del sistema y tiene que ser parte de la solución". "Estamos dispuestos a contribuir a la solución siempre que se mantenga la simetría entre los responsables del problemas y quienes deben contribuir a resolverlo", añadió.
El pasado mes de enero las compañías titulares de centrales termoeléctricas en España, Abengoa, Acciona y ACS –conocidas como "la triple A"– se reunían con el Ministerio de Industria para proponer un programa alternativo al ofrecido por las eléctricas, y defendido por el presidente de Unesa, Eduardo Montes, y el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. En ambos casos acusando a las tecnologías solares, fotovoltaica y termoeléctrica, de la subida del precio de la luz y del aumento descontrolado del déficit tarifario. Abengoa, Acciona y ACS, interpretaban este plan como "un ataque frontal".
En primavera, la Comisión Nacional de la Energía (CNE) publicó un informe relativo al sector energético español del que se podían destacar diversas actuaciones propuestas para paliar el desmadrado déficit de tarifa que sufrimos. Este informe, tal y como recoge el blog Desde el Exilio apuntaba, precisamente, al recorte en las primas a las energías renovables y especialmente a la generación termosolar.