No es la primera vez que sucede. El enésimo informe de la troika -Comisión Europea, Banco Central Europeo (BCE) y Fondo Monetario Internacional (FMI)- sobre el plan de ajuste al que se comprometió Atenas a cambio del rescate internacional ya mostraba que Grecia estaba muy lejos de cumplir con las exigencias marcadas en materia de reformas, reducción de gasto público y privatización de activos.
Entre otras condiciones, el rescate imponía, además, la necesidad de que Grecia redujera de forma paulatina su número de funcionarios y empleados públicos. Sin embargo, este punto también ha sido pasado por alto por las autoridades helenas. Pese a las promesas de reducir su plantilla, Grecia contrarrestó el despido de empleados programado mediante la contratación de 70.000 personas entre 2010 y 2011, según un informe elaborado por el ministro saliente de Finanzas, George Zannias, informa la prensa griega.
Este tipo de contrataciones se concentraron, sobre todo, en la administración local, los servicios sanitarios y la policía. En concreto, los ayuntamientos llegaron a fichar a cerca de 12.000 personas en plena operación de fusiones municipales a fin de reducir costes en la administración local.
El primer plan de rescate, acordado en 2010, obligaba a cubrir tan sólo una plaza de cada cinco empleados que se jubilaran o se dieran de baja. Así, aunque se retiraron 53.000 funcionarios en 2010 y otros 40.000 en 2011, la mayoría de vacantes se llenaron casi de inmediato mediante la contratación de unos 70.000 empleados. De este modo, la plantilla del sector público permaneció prácticamente estable durante este período, rondando las 692.000 personas.
La troika visitará Atenas
Este nuevo engaño se conoce poco antes de que la troika envíe de nuevo una delegación a Atenas con el objetivo de verificar el cumplimiento del plan de ajustes que impone el segundo plan de rescate del país -por un importe de 130.000 millones de euros-.
El FMI enviará una misión técnica "a principios de la próxima semana" para evaluar los recientes acontecimientos económicos y luego analizar las "políticas necesarias" para alcanzar los objetivos del programa de rescate, según informó el jueves. "Esta misión de toma de datos será seguida de una misión de negociación para discutir con las autoridades griegas las políticas necesarias para alcanzar los objetivos del programa", indicó el portavoz del FMI, Gerry Rice, en su rueda de prensa quincenal. No obstante, no precisó la fecha en la que se desplazaría a Atenas esta misión de negociación.
El FMI ofreció su colaboración al nuevo Gobierno griego formado tras las elecciones del pasado 17 de junio para "restaurar la estabilidad financiera y el crecimiento". Los recursos del paquete de ayuda internacional son imprescindibles para que Grecia mantenga su capacidad de pago, pero Atenas ha solicitado una relajación del calendario de ajuste para que sea menos agresivo.
El presidente de la República, Karolos Papulias, pide más tiempo en la cumbre de Bruselas para cumplir los objetivos exigidos a cambio del segundo plan de rescate. El jefe del Estado se desplazó a la Cumbre Europea que concluye este vienes portando una carta del líder de Nueva Democracia, Antonis Samarás -el vencedor de las elecciones-, en la que pide "abrir el debate" sobre eventuales cambios en el acuerdo firmado por el anterior Gobierno y que obliga al país a duras medidas de austeridad. Exige más tiempo para cumplir los objetivos de reducción de la deuda y el déficit y se explica que el pueblo griego podría reaccionar negativamente a nuevas exigencias de austeridad.