Wall Street vivió este viernes su peor día del año después de la publicación de un decepcionante informe sobre empleo en Estados Unidos que tiñó de rojo sus principales índices y provocó que el Dow Jones de Industriales perdiera todo lo que llevaba ganado en lo que va de 2012.
El principal indicador del parqué neoyorquino cerró este viernes la sesión con una fuerte caída superior a dos puntos porcentuales (-2,22%), que se tradujo en un descenso de casi 275 puntos en un solo día, el más pronunciados del año, y que empujó al Dow Jones por debajo de los 12.217,56 puntos en los que cerró 2011.
Peor fueron hoy las cosas en los otros dos índices de referencia en Wall Street, ya que el selectivo S&P 500 perdió el 2,46%, aunque acumula todavía una ganancia interanual del 1,63%, y el Nasdaq, donde cotizan algunas de las mayores empresas tecnológicas del mundo, que retrocedió el 2,82% aunque gana el 5,46% desde enero.
Después de haber cerrado mayo con su peor mes desde que comenzó el año, Wall Street volvió a teñirse de rojo en el arranque de junio, ya que los mercados no digirieron bien el último informe del Departamento de Trabajo que reveló que la tasa de desempleo subió en mayo una décima hasta situarse en el 8,2%.
La economía estadounidense creó el mes pasado 69.000 puestos de trabajo, la cifra más baja de los últimos once meses y muy por debajo de los 150.000 nuevos puestos de trabajo que habían vaticinado los analistas, con lo que ahora los desempleados en EEUU se mantienen en 12,7 millones de personas.
Tampoco llegaron buenas noticias del sector manufacturero, que redujo modestamente en mayo su expansión, después de que en abril creciera a su mayor ritmo desde junio de 2011, según informó el Instituto de Gestión de Suministros (ISM) que dejó el índice con que mide el sector en 53,5 puntos, frente a 54,8 del mes precedente.
A los decepcionantes datos de EEUU se sumaron las dudas sobre la zona euro, que lleva semanas inquietando a los operadores bursátiles, y que hoy también tiñó de rojo las principales plazas financieras del Viejo Continentes: Francfort (-3,42%); París (-2,21%); Londres (-1,14%); Milán (-1,04%) y Madrid (-0,41%).
Tampoco ayudaron los últimos datos coyunturales en China, tras publicarse que el Índice de Gerentes de Compras cayó en mayo a 50,4 puntos, interpretado como un nuevo signo de cierta ralentización en el gigante asiático y que arrastro a las bolsas de la región: Tokio (-1,20%); Hong Kong (-0,29%); Seúl (-0,49%) y Bangkok (-2,3%).
La jornada también estuvo marcado por el descenso imparable del petróleo: el barril de Texas, de referencia en EEUU, cayó el 3,81% y cerró en 83,23 dólares, por primera vez por debajo de 84 dólares desde octubre pasado, mientras que el de Brent, de referencia en Europa, bajó el 3,37% hasta 98,43 dólares, su mínimo en ocho meses.
El gran protagonista empresarial del día volvió a ser Facebook, cuyas acciones se desplomaron el 6,35% hasta 27,72 dólares, más de diez dólares por debajo del debut de la red social hace dos semanas, la mayor pérdida registrada desde 1995 para una empresa protagonista de una OPV por encima de los mil millones de dólares.
Tampoco le fueron muy bien las cosas a otra de las firmas que acaban de aterrizar en Wall Street, el portal de descuentos Groupon, que vio como sus títulos se desplomaban durante la jornada más del 10% hasta su nivel más bajo desde su estreno bursátil hace seis meses, y que cerraron con un descenso del 8,93%.
Tras una semana más corta de los habitual por la festividad del lunes, los inversores en Nueva York descansan ya para conocer el miércoles el Libro Beige de la Reserva Federal, la comparecencia de su presidente un día después en el Congreso, además de nuevos datos sobre peticiones semanales de desempleo y la balanza comercial.