Que los chinos dejen de trabajar un solo día es algo que cuesta creer, pero en la mentalidad de los trabajadores y empresarios chinos que viven en España parece que algo está cambiando y no se cierran a la posibilidad de secundar la huelga del próximo jueves. El Presidente de la Asociación de Alimentación de Chinos, Pedro Zhang, en declaraciones a Libre Mercado no ha querido posicionarse ni generalizar. En este tipo de huelgas, "los empresarios normalmente no salen, sean chinos o no, y en el caso de los trabajadores chinos no salen tanto", señala Zhang.
Gran parte de los trabajadores chinos en España son autónomos y regentan tiendas que van desde los ultramarinos hasta ropa o peluquerías, ya que han sabido diversificar su negocio. De hecho, a 31 de junio de 2011, los chinos formaban el colectivo extranjero extracomunitario más abundante en cuanto a afiliación a la Seguridad Social en régimen de autónomo. Hay un total de 34.753 ciudadanos chinos afiliados en España en este régimen.
En esas tiendas, sean del tipo que sean, los trabajadores suelen ser, en su mayoría, de la unidad familiar, lo que hace difícil pensar que secunden la huelga. No obstante, Zhang ha destacado que "los empresarios chinos no harán huelga, como no la hacen los empresarios españoles".
El pasado mes de noviembre este colectivo se manifestó por primera vez en España, aunque por razones muy distintas a las tradicionales. Los comerciantes se concentraron frente del Ayuntamiento de Madrid para pedir que se les conceda la denominada "segunda licencia", que permite vender alcohol, y no ser así "discriminados" con respecto a otros vendedores.
Ahora, las asociaciones chinas más importantes en España no dejan claro cuál va a ser su postura de cara al 29-M. En declaraciones a Libre Mercado el presidente de la Asociación de Chinos en España (ACHE), Chen Shengli, afirma que "cada uno tiene su derecho a manifestarse, nosotros no forzamos a nadie a trabajar. Hay gente que hará huelga y gente que no, pero cuando hay crisis todo el mundo tiene que aportar", afirma. Pese a ello, Shengli admite "no tener datos de los ciudadanos chinos que harán huelga", aunque matiza que "muchos no abrirán por miedo".
Es por ello que el Presidente de ACHE pida más medidas de seguridad para garantizar que los que quieran trabajar puedan hacerlo libremente sin temor a represalias, como ha ocurrido en otras ocasiones.
Con respecto a la reforma laboral y al resto de medidas tomadas por el Gobierno de Mariano Rajoy, que han servido como argumento a los sindicatos para convocar una huelga general, Shengli opina que "cuando hay una situación difícil todo el mundo tiene que aportar, hay que tomar medidas. Cuando las toma el Gobierno, nadie sabe si esas decisiones son perfectas, pero es necesario tomarlas. Frente a la crisis hay que tomar decisiones", añade Shengli.
Por otro lado, destaca que hacer huelga o no "no es una cuestión de cultura sino de mentalidad. Todos queremos luchar por los derechos de los trabajadores, pero hay otras cosas más importantes". Shengli se refiere a las dificultades de cobro que sufren los empresarios por la elevada morosidad. "Hasta que no se solucione esto, no se puede proteger al trabajador. La huelga general se supone que se hace para proteger a los trabajadores, pero hay muchas cosas que van antes. No se está protegiendo realmente al trabajador", sentencia Shengli.
Así, el Presidente de ACHE denuncia que cuando una empresa entra en proceso concursal, primero se paga a Hacienda y a la Seguridad Social, y el último que cobra -si es que llega a cobrar- es el trabajador. Mientras esto exista, no se puede proteger al trabajador con una huelga".